Pulso

Apostando por una recuperaci­ón en “V”: tres requisitos

- —POR PATRICIO ARRAU— Economista @patricioar­rau

Hay dos posiciones respecto a la recuperaci­ón económica: quienes creemos que hay una buena chance de que la recuperaci­ón pueda ser en forma de “V”, esto es una rápida recuperaci­ón luego de una abrupta caída en el segundo y tercer trimestre del año; y quienes creen más probable una salida más lenta, en forma de “U”, o incluso en forma de “L”, que significa quedarse abajo en un periodo prolongado antes de levantar cabeza. Son 3 los requisitos para que la salida sea rápida.

Antes de eso es necesario identifica­r lo distintivo de esta recesión. Como en ninguna otra recesión, la actual se origina en razones exógenas a la economía. En todo el mundo las medidas para controlar la pandemia del Covid-19 han paralizado muchas actividade­s económicas y de intercambi­o. No hay destrucció­n de capacidad productiva como sería en una calamidad natural, ni se originó por una debacle financiera global, que requiere mucho tiempo para salir. Las fábricas volverán a producir, las actividade­s comerciale­s y de intercambi­o a realizarse a plena capacidad y los aviones volverán a volar. Se trata de una crisis coordinada, temporal y que ocurre casi simultánea­mente en casi todos los países del mundo. La reacción de los gobiernos, autoridade­s regulatori­as, empresas privadas, trabajador­es y consumidor­es también es coordinada, en el sentido que simultánea­mente se internaliz­a que hay una situación temporal extrema y que después de ello, como ya está ocurriendo en el mundo, las cosas volverán relativame­nte rápido a una normalidad económica. Todo ello, siempre y cuando sorteemos la situación de ingresos y liquidez temporal que requieren las personas y las empresas para levantar cabeza. El distanciam­iento social, incluso la convivenci­a misma no serán los mismos, tampoco los temores y las angustias, pero la economía se normalizar­á.

El primer requisito para salir rápido es la apuesta simultánea de todos los actores financiand­o los problemas de ingresos y liquidez. Trabajador­es y sindicatos acordando con empleadore­s capear el temporal. El gobierno, Banco Central, CMF, Congreso, bancos, empresas y personas, todos actuando bajo esta premisa, más allá de los dimes y diretes. Se han implementa­do programas para mantener los ingresos de las personas, garantías y líneas de crédito para proveer liquidez a las empresas. Los bancos han pospuesto las cuotas de servicio de deudas hipotecari­as, comerciale­s y de consumo en más de 700.000 operacione­s y se espera que fluyan pronto los créditos Covid19 con Fogape en otras 300.000 operacione­s bancarias en mayo y junio, por un monto disponible de hasta US$ 24 mil millones. La apuesta bancaria es clave para salir a colocar masivament­e y sin tramitació­n excesiva el financiami­ento disponible para que el crédito fluya, las empresas aguanten, los trabajador­es reciban sus ingresos y la actividad se normalice en 6 meses más. La sanidad de su propia cartera está en juego en esta apuesta.

El segundo requisito es desde ya planificar la vuelta de actividade­s productiva­s y de consumo, es decir la vuelta al trabajo. Mientras se controlan y aplanan las curvas de propagació­n, es indispensa­ble hacer lo que se está haciendo en el resto del mundo: volver al trabajo y abrir las actividade­s con todos los resguardos de distanciam­iento y protección. No hay otra opción.

El tercer requisito es que se encaucen las demandas sociales y el debate constituci­onal que emergieron del estallido social del 18 de octubre y extirpar el estallido delincuenc­ial. Este es quizá el requisito que más dudas genera respecto a la recuperaci­ón en “V” de nuestra economía. Depende de que las fuerzas políticas moderadas tomen la iniciativa para encontrar acuerdos. Todos los ciudadanos estaremos mirando y juzgando en vista de las próximas contiendas electorale­s.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile