“Es esencial que reconozcamos lo exitoso del modelo públicoprivado”
—El año pasado el gobierno prometió una reforma a la industria sanitaria. Esto cobró mayor fuerza tras la crisis en Osorno por el corte de agua de 10 días que afectó en julio del año pasado. Sin embargo, hasta ahora, el Ejecutivo no presenta el proyecto de ley. La iniciativa incluiría multas más altas y compensaciones a los usuarios. La rentabilidad mínima de las sanitarias también asoma como uno de los cambios regulatorios.
¿Qué cambios proponen ustedes como industria a la regulación sanitaria?
—Los grandes principios que nos mueven son, en primer lugar, que los cuerpos de ley de nuestro país contengan la declaración de que, como sociedad, damos prioridad al agua para el consumo humano por sobre otros usos. Por otra parte, nos parece esencial que reconozcamos lo exitoso del modelo públicoprivado de gestión del ciclo del agua en Chile en los últimos 20 años para la provisión de servicios sanitarios continuos y de calidad en las ciudades de Chile. Dado eso, planteamos que los cambios que se introduzcan al marco regulatorio del sector incorporen los incentivos que nos permitan abordar los desafíos que enfrentamos como sociedad: en lo esencial, adaptarnos al cambio climático tanto a través de inversiones significativas como de cambios en el comportamiento de los usuarios. Esto quiere decir, por ejemplo, mecanismos que promuevan la reutilización del agua servida tratada y la adopción de estructuras tarifarias flexibles, que permitan incorporar incentivos ambientales al ahorro y a la vez beneficios sociales. Debemos asegurar el agua hoy y también para las futuras generaciones.
La propuesta actual, ¿permite asegurar que la calidad de servicio no se verá alterada? —Todos los esfuerzos que hacen las empresas sanitarias están destinados a mantener calidad y continuidad del servicio, y así ha sido, incluso en las dos crisis que atravesamos en este momento, la pandemia y la de escasez hídrica, pero necesitamos señales adecuadas que nos orienten en ese sentido, dado que se requiere importantes inversiones para ello.
Estos cambios que ha mencionado el Ejecutivo, ¿qué efecto tendrán en las inversiones? —Es muy aventurado hoy especular sobre ese escenario; lo que conocemos como proyecto, antes de que se iniciara la pandemia, no ha ingresado aún al Parlamento. El gobierno mencionó modificaciones a la normativa para corregir elementos como la modelación tarifaria, ¿qué riesgos ven?
—Insisto, hasta ahora, lo que conocemos de la propuesta de la normativa son las presentaciones que han hecho el ministro y el superintendente de servicios sanitarios ante una comisión parlamentaria. Lo correcto es esperar a que haya un proyecto concreto, con disposiciones precisas, para poder emitir una opinión fundada y presentar también nuestras propuestas ante los legisladores.P