Su pasado universitario DC y su “campaña” por Gutenberg Martínez
La familia de Rodrigo Cerda era de clase media. Su padre, Jorge Cerda, era profesor de inglés en la Universidad de Santiago, y su madre, Ester Norambuena, profesora de Física y Química en la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación. Las conversaciones familiares fluctuaban entre la política y el fútbol, básicamente por influencia paterna.
Jorge Cerda era un militante DC típico de clase media: de aquellos que no aspiran a cargos, pero que sí pagan sus cuotas y asisten a las reuniones del partido. Como buen militante, en 1989, para las elecciones parlamentarias, fue con sus dos hijos, Rodrigo y Sebastián (también economista), a repartir volantes a una feria cercana a favor del entonces candidato DC, Gutenberg Martínez. Ese fue el comienzo del acercamiento de Cerda al pensamiento democratacristiano. A principios de los 90, ya como estudiante de Ingeniería Comercial en la Universidad Católica, esas raíces democratacristianas fueron siendo refrendadas. Participó activamente e incluso fue en una lista para encabezar la federación en 1993, pero perdieron ante la que encabezaba Fulvio Rossi (en la foto aparece con su lista para las elecciones).
Su compañero de ese entonces, el hoy abogado DC Álvaro Villanueva, dice que Cerda “era un militante muy activo y con compromiso con el partido, participaba en todos los ampliados”. Además, estuvo en charlas de formación de la DC. “Si tenía que ir de San Joaquín a Campus Oriente para participar en una reunión del partido, lo hacía. Siempre participó”.
Tenía capacidad negociadora, con “muñeca” recuerdan, lo que puede sacar a relucir ahora en su cargo de ministro.