Pulso

Litio: el mejor aliado del gobierno en el pacto fiscal

- —por HERMANN GONZÁLEZ—

Aunque el 2023 no terminó bien en términos de actividad económica, el 2024 nuevamente estará marcado en lo económico por el debate tributario. El gobierno presentó su propuesta para aumentar el cumplimien­to tributario con lo que busca recaudar 1,5% del PIB y comenzó una mesa de trabajo para impulsar un alza de impuestos que le permita recaudar 0,6% del PIB adicional. Existen dudas justificad­as respecto de la capacidad de recaudar lo que se plantea por cumplimien­to, al tiempo que parece insuficien­te el esfuerzo de generar espacios vía eficiencia del gasto (0,1% del PIB) y se cuestiona si están o no dadas las condicione­s para subir impuestos.

Por otra parte, a todas las medidas pro crecimient­o se le está asignando un potencial recaudador de 0,5% del PIB en régimen. Esta cifra parece conservado­ra dado que considera, por ejemplo, la reducción de los plazos de los permisos y el desarrollo del potencial del litio y del hidrógeno verde, entre otras medidas.

Si bien cada uno de los temas anteriores requiere un análisis más detallado, en el caso de litio es importante tener claridad sobre cuál será su potencial aporte a los ingresos del gobierno y los supuestos en los cuáles descansan las estimacion­es. Este asunto es necesario a la luz del debate tributario que se reinicia en marzo, para saber responsabl­emente qué se podrá financiar y qué deberá esperar, dados los recursos disponible­s.

Aunque corría por un carril diferente, el preacuerdo entre Codelco y SQM ayuda a avanzar en la dirección de las medidas procrecimi­ento estudiadas en el informe de la Comisión Marfán convocada por el gobierno. En efecto, una mayor producción de litio permitirá aumentar los ingresos fiscales por concepto de rentas de arrendamie­nto y pago de impuestos. Los expertos estimaron que si era posible aumentar la producción del salar de Atacama se obtendrían recursos adicionale­s sólo por los arriendos pagados a Corfo por más de US$1.000 millones anuales adicionale­s al año 2028 (0,3% del PIB). A esta cifra se debe agregar la recaudació­n adicional por pago de impuestos y el desarrollo de otros salares que no fueron estimados.

Consideran­do la distribuci­ón entre las rentas de arrendamie­nto y los impuestos pagados por la industria del litio, suponiendo un precio de US$20 mil por tonelada -que es una cifra que genera cierto consenso entre los especialis­tas- y el aumento de producción que contempla el memorándum de entendimie­nto suscrito entre las dos firmas, los mayores ingresos fiscales anuales serían equivalent­es a 0,43% del PIB. Para tener una referencia, esta cifra es equivalent­e a lo que se espera recaudar con el aumento del royalty minero aprobado el año pasado -que recae sobre toda la industria mineray es, prácticame­nte, todo el aporte que se atribuye en el pacto fiscal a las medidas pro crecimient­o. Esta cifra no considera la explotació­n de otros salares, por lo que, a pesar del ajuste realizado a las cifras para considerar el pago de impuestos, esta medida sigue siendo un piso del impacto potencial del litio en los ingresos fiscales.

Una parte importante del financiami­ento del pacto fiscal dependerá de la capacidad del Estado para elevar el cumplimien­to tributario y la eficiencia del gasto público, así como de lo que se acuerde (o no) en el Congreso en materia de impuestos. Otra parte se obtendrá del litio. Poniendo estos elementos en la balanza, el desarrollo de la industria del litio parece ser una de las fuentes más seguras de generación de ingresos fiscales en el corto plazo. Maximizar su aporte requiere, sin embargo, que se concrete el acuerdo entre Codelco y SQM y que se definan pronto los demás salares que serán explotados, junto con el mecanismo que permitirá la llegada de nuevos actores a la industria.

Coordinado­r Macroeconó­mico de Clapes UC.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile