Venezolanos rechazaron las elecciones
Protestas de exiliados en el mundo y pocos votantes. No había resultados.
● En medio de las protestas de venezolanos exiliados en diferentes partes del mundo y con la soledad de los colegios electoralres en el país, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, se encaminaba ayer a su reelección pese a la profunda crisis del país.
Fueron unos comicios con modesta afluencia, boicoteados por la oposición y desconocidos por gran parte de la comunidad internacional. Una votación para la que fueron llamados 20,5 millones de electores, terminaba a las 6:00 de la tarde pero los centros electorales donde había votantes permanecían abiertos.
Muchos colegios, sin embargo, estuvieron semivacíos. La jornada transcurrió en tranquilidad y con una moderada afluencia de votantes, mayor en los barrios populares donde el chavismo ejerce fuerte influencia. Analistas estiman que una alta abstención favorecerá a Maduro por el voto duro chavista del 25 por ciento.
Apoyada por varios gobiernos, la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) promovió la abstención al negarse a participar en un proceso que considera una “farsa” para perpetuar a Maduro en el poder. Pero el exchavista Henri Falcón se separó de sus filas, con la esperanza de capitalizar la impopularidad del mandatario, que ronda el 75 por ciento ante la debacle económica y social. Apagones, falta de comida, medicinas, transporte y agua; precios por las nubes con un ingreso mínimo que da para un kilo de leche en polvo, abruman al venezolano y cientos de miles emigraron en los últimos cuatro años.