RESPUESTAS

TE MUEVES EN EL MUNDO DEL EQUILIBRIO EMOCIONAL

Si la mayoría de tus respuestas fueron A

Tienes claro que no tienes que ser una madre superdotada y te aceptas tal y como eres. Tu truco es no tratar de impresionar a nadie y por eso te sientes segura de ti misma y de tus decisiones. Comprendes la importancia de ser generosa, accesible, respetuosa y, lo más importante, aceptas tus errores con humildad. ¡Siéntete orgullosa de la manera en que educas a tus hijos porque les estás dando las bases correctas para ser fuertes, independientes y seguros!

¡NECESITAS TENER EL CONTROL!

Si la mayoría de tus respuestas fueron B

Son mujeres extremadamente autoritarias que necesitan tener el control total de las vidas de sus hijos, les impiden pensar por sí mismos o que tomen decisiones. Esto causa muchos problemas en la autoestima de los menores, generándoles inseguridades y frustraciones en sus relaciones interpersonales. ¡Sería prudente que analizaras tus acciones para detectar en qué medida estás comportándote como una madre controladora y así corregir a tiempo!

¡ESTÁS… AUSENTE!

Si la mayoría de tus respuestas fueron C

Este tipo de mamás no solo están ausentes físicamente, sino que aun estando presentes no desarrollan un rol de guía, no generan en sus hijos seguridad ni estabilidad. Esto les produce un sentimiento de desprotección e inestabilidad emocional y dificultades para comprender el mundo que les rodea. ¿Qué hacer? Aprovechar pequeños momentos del día, como la hora del desayuno o de la cena, para reforzar pensamientos positivos en ellos y para preguntarles cómo van sus cosas. ¡Este es un regalo tanto para ellos como para ti!

PRIMERO TÚ, SEGUNDO TÚ Y TERCERO TÚ Si la mayoría de tus respuestas fueron D

Tienden a ser narcisistas. Están preocupadas por las apariencias, y su relación maternal es superficial porque están centradas en sí mismas. El problema radica en que desde afuera pueden parecer madres modelo, pero si el hijo necesita su apoyo es probable que no se lo den y, por el contrario, comiencen a hablar de sus propios problemas. Una madre narcisista pedirá atención, pero por mucho que sus hijos se esfuercen, nunca lograrán complacerla. ¡Es importante que trabajes en tus comportamientos para mejorar la comunicación, porque no significa que no los ames, es solo que no sabes relacionarte con ellos!