Paola Turbay fascinante
Es una mujEr dE caráctEr quE dEfiEndE la dEmocratización dE la cultura y El rol fEmEnino. En su calidad dE figura pública y dE EmprEsaria, ha tEnido más dE una pElEa, ninguna capaz dE hacErla rEnunciar a sus batallas. la ExrEina, actriz, madrE, Esposa y EmprEsaria sE vistE dE gala y cElEbra junto a aló sus 24 años dE casada En Esta, nuEstra Edición dE amor y amistad, y rEvEla tEmas pErsonalEs nunca antEs tocados.
{E}El rostro de Paola Turbay (47) ha sido ima- gen de infinidad de campañas en sus 27 años de carrera. Ha actuado en novelas, series y hasta se abrió un espacio en el competido mercado de Los Ángeles. No se mudó a la ciudad de las estrellas persi- guiendo el sueño de triunfar en Hollywood. Era más bien un proyecto personal y de familia, que terminó convirtiéndose en un camino espiritual y de mucho movi- miento interno.
Pero ella siempre ha querido ir más allá y por eso emprendió con 24/7, su exitosa línea de belleza, y con el festival IndieBo, ambos sueños consolidados. Su pelo miel, sus facciones perfectas, su boca generosa y sus ojos verdes se complementan con una voz dulce que muchas veces duda buscan- do la palabra exacta que aveces no encuen- tra. Cada gesto suyo ayuda a alimentar ese magnetismo que encandila.
Aunque es de aspecto frágil y sonrisa fá- cil, Paola Turbay es una mujer con carác- ter, determinada y con enorme capacidad para manejar personalidades y situaciones difíciles, lo que la encumbra como empre- saria. Los que la conocen saben que es di- recta, sagaz para los negocios y una traba- jadora incansable que todo el tiempo está gestando ideas, por eso son pocos los que logran seguirle el ritmo.
Las personas cercanas a ella coinciden en que está en su mejor momento. Algunos lo atribuyen a una madurez y crecimiento
Tengo el hombre, la relación, el matrimonio y la familia que siempre soñé... Mis hijos son Mi Mejor proyecto”.
espiritual que se manifiesta en una actitud más asertiva, con el control absoluto de su vida, aunque también juega otro fac- tor importante: tener a sus hi- jos, Sofía (22) y Emilio (18), “del otro lado” y el desear reinven- tarse junto a su esposo y gran amor de su vida, Alejandro Es- trada. “Casarme, tener hijos y conformar esta familia ha sido la mejor decisión de mi vida”, dirá más adelante en esta en- trevista, la cual desarrollamos durante su tarde de peluquería.
¿Luego de varias ediciones exitosas del festival IndieBo, te dio tristeza no haber podido lograrlo este año?
Claro, pero es algo que nos va a pasar cada cuatro años en época de mundial, hasta el momento en el que lleguemos a tener un modelo sostenible, por eso ya estoy enfocándolo hacia eso. El festival no puede depender de los patrocinios, sino que vamos a moverlo de otra forma para poder rodar sin depender de esa plata. Con este nuevo gobierno creo que va a ser distinto, pues el pre- sidente tiene claro el impacto del tema cultural para un país.
Pero este año sí van a repetir el proyecto del IndieBus…
La idea es volver con éxito del CineBus, que representa la de- mocratización de la cultura del Festival IndieBo, y tener algo de visibilidad este año. En este bus recorremos las 20 localida- des de la ciudad, 10 de día más 10 de noche, más las cárceles de La Picota y El Buen Pastor, con el fin de lograr funciones de buenas películas para mu- cha gente y generar un senti- do de pertenencia de la ciudad.
Siguiendo con las buenas noticias, lanzas por estos días tu tienda virtual con 24/7, tu línea de productos de belleza.
Sí, estoy muy emocionada. Ya llevo tres años con el proyecto de la marca, arran- camos con una estrategia para estar en 120 puntos en las grandes superficies de una cadena y ahora optamos por abrir nuestro e-commerce. Nos hemos dado cuenta de que la gente está comprando cada vez más online, por eso lanzamos la tienda virtual. La única forma de tener una marca dermocosmética a bajo costo es ahorrándome el trabajo de mercadeo, y creo que esta opción es ideal para se- guir manteniendo el valor justo.
¿Cómo ha sido el desarrollo del proyecto?
Maravilloso. Llevamos un tiempo tra- bajándole y era muy importante para mí poder lograrlo, pues si tengo mil asesoras en cada punto o invierto en comerciales radiales o televisivos, eso les sube el costo a las cremas, entonces la única forma de tener productos tan buenos y a ese costo es crear una manera de llegarle a la gente, por eso me inventé un diagnosticador.
¿Cómo funciona?
Entras a la página, pones tu rango de edad, tu tipo de alimentación, el tipo de piel que tienes, tus necesidades, preocu- paciones, etc., y te sugerimos tu rutina ideal. Esta es la forma más bonita de dar- le a la gente una asesoría perfecta. Hice un curso intensivo de algoritmos y de matemática; todo esto lo hemos logrado gracias al trabajo de un gran equipo y al contacto con la gente en punto de venta y en mis redes sociales. Yo ya entiendo cuáles son las necesidades de los consu- midores.
¿Cuándo vamos a conocer más productos de tu marca?
Ya tengo listos varios lanzamientos y voy a aprovechar para presentarlos en el e-commerce. No hemos ni anunciado la página y ya hemos hecho 250 ventas. Por error estuvo montada y ha sido un éxito sin decirle a nadie. Está divino el proyecto.
¿Ha sido una labor titánica competir en el mercado con los grandes?
Totalmente. La gente sabe que yo abogo por los intere- ses de los demás, me preocu- pan las injusticias y creo que debe haber espacio para todos. Hay gente que solo usa marcas internacionales, pero hay otra que es más curiosa y sabia y no se deja llevar por el merca- deo, prueba mis cremas y así se ha creado un voz a voz in- creíble. Es que mis productos son realmente buenos porque fueron cinco años desarrollán- dolos y de verdad funcionan. Una crema para la cara es algo muy delicado, entonces si de verdad no fueran buenas no las recomendarían tanto.
¿Qué opina Alejandro Estrada, tu esposo, del crecimiento de tu marca?
Este fue un proyecto que em- pezamos los dos, pero él se ha ido distanciando y ha enten- dido que yo quiera manejarlo
sola, a diferencia del festival de cine, que sí lo manejamos a cuatro manos. Los pro- ductos son como un bebé que me acerca mucho a las mujeres y es una responsabi- lidad que tengo, pues encontré un espacio en donde puedo hacer un aporte y darles herramientas para que cambien su vida.
UN AMOR PARA sieMPRe Celebras por estos días 24 años de casada. ¿Cuál es el secreto para mantener un matrimonio estable?
Empezamos a salir el 24 de septiembre, el día del cumpleaños de mi papá, y en esa misma fecha (dos años después) nos casamos. Llevamos 24 años de casados y 26 juntos. Justo hoy lo miraba duran- te el arrunchis de la mañana y creo que es el hombre, la relación, el matrimonio y la familia que siempre soñé, y me ima- gino muriéndome al lado de mi marido y al tiempo, como en ‘El penúltimo sueño’; así será nuestra muerte.
Le sigues agradeciendo a la vida por este encuentro…
Todos los días. Primero, tuve suerte; se- gundo, creo que siempre fui muy realista y no me casé con el imaginario, sino con lo que tenía enfrente y entendí que no quería cambiarlo. A los quince días de co- nocerlo dije ‘este es el mío’, pero hay que trabajarle al matrimonio y a la relación, no volverse cómodo. Hoy más que nunca como mujer tienes una pata afuera, tene- mos opciones y no dependemos del otro en términos económicos, entonces tiene que haber una constante conquista, y si te gustó un día, ¿por qué no te va a seguir gustando el resto de tu vida?
¿Qué errores consideras que no se deben cometer en pareja?
Uno se deja desencantar a veces y aban- dona la relación. Con los años uno entra en la zona de confort y uno tiene que ver el matrimonio como una empresa que se construye y hay que reinventarse, to- mar cursos, explorar, llamar a la agencia creativa (risas). Hacer viajes, escaparse en pareja, salirse de la cotidianidad y tener planes a corto, mediano y largo plazos. La conexión es lo más importante.
¿Cómo viven esta etapa cuando ya los hijos están grandes?
Sofía está en Nueva York hace ya un tiem- po, y Emilio se nos va también en 10 meses. Estamos llegando a esta nueva etapa de sol- tar a los hijos y me hace feliz que sea a esta edad, que es lo bueno de haberlos tenido jó- venes, porque voy a llegar a la mitad de mi vida y nos faltan tantas cosas por hacer… Tenemos tantos planes, y antes dejábamos de hacerlos por la fa- milia, pero ahora hay menos va- riables y va a ser muy divertido.
¿Qué planes tienen en mente?
Estamos enfocándonos en el tema del impacto social y am- biental. Alejandro está muy metido en temas que tienen que ver con basuras, temas de marihuana medicinal, tópicos que en realidad impactan a la sociedad. También queremos estudiar, puede hacer un se- mestre en un barco o hacer un curso de historia… Leer más y viajar más.
¿Cómo van a celebrar estos 24 años juntos?
Nos vamos de viaje, sí o sí.
UNA LeCCiÓN De ViDA Las cifras de depresión en las mujeres colombianas siguen en aumento. ¿Es verdad que fuiste víctima de esta enfermedad?
Sí. La depresión es lo peor que hay. Yo pasé por este dra- ma después de que nació So- fía, tuve un desbalance de la tiroides, se me descuadró y fue una vaina progresiva que casi me mata. Ya me había adelga- zado y empecé a engordarme y la depre me fregó.
¿Cómo recuerdas esos días?
Tenía una depresión berraca y me tocaba hacer fotos, traba- jar y sentía que no me merecía nada, lloraba todos los días y a todas horas porque me dio el Síndrome de Hashimoto, que tiene un impacto muy fuerte sobre la tiroides. Es increíble cómo la hormona tiroidea te regula absolutamente todo tu cuerpo… Todos los días lloraba a las seis de la tarde, me estaba enloqueciendo.
¿Qué hiciste para sobrellevar la enfermedad?
En la mañana no era capaz de levantarme, estaba fatigada, íbamos con Alejandro de fiesta, bailaba una canción y ya que- daba cansada… Solo sentía que quería morirme, le decía a Ale- jandro que deseaba la muerte, entonces fui al médico, me hice exámenes de todo, fui donde el ginecólogo y le pedí que me reco- mendara un psiquiatra porque tenía una depresión profunda, él me envió al endocrinólogo, me detectaron el síndrome y con el tiempo me mejoré, pero es algo que no le deseo a nadie… Casi me muero.
¿Qué opinas de la gente que juzga la medicación psiquiátrica?
Lo mío era un desequilibrio hormonal, pero la depresión es una baja de dopamina o de serotonina, punto. Creo que es algo que no debe juzgarse. Yo estoy medicada por déficit de atención desde hace algunos años y es un tema que se me complicó después de mis dos embarazos. El día que empe- cé a pasarme los semáforos en rojo y que me ausenté por momentos, comencé a tomar pastillas. Esta medicación le ayuda a mucha gente a sobre- llevar el día a día.
¿Cómo estás de salud actualmente?
Muy bien, sana, llena de energía y de ganas de trabajar.
¿Qué les aconsejas a las mu- jeres que padecen tu misma enfermedad?
Que consulten a su médico, llega un punto en el que ya no es posible seguir viviendo en ese desbalance y que confíen, pues sí existe una solución.