¡AGARRE USTED LA BICICLETA!
Criticar a Nairo Quintana resulta fácil desde el lado del espectador o aficionado al ciclismo. Más aún, si se hace desde el lado del desconocimiento, como muchas personas acostumbran. Sin dar un pedalazo, personas osadas señalan, atacan y buscan únicamente destruir las heróicas hazañas de quienes les representan, en este caso, a bordo de los caballitos de acero.
Nos acostumbramos a criticar cuando las cosas no salen como se esperan, y con Nairo
Quintana no ha sido la excepción, insisto, por el desconocimiento de un deporte tan bravo como es el ciclismo, el cual clara y lamentablemente tampoco escapa de las modas.
Las cosas no se le dan y solo le llueven críticas sin funda- mento y desconsideradas, además de bastante atrevidas. Pero agarre usted la bicicleta e intente, si quiera, emular lo que hace Nairo. Seguro no es o será capaz.
Sencillo es lanzar pullas o mensajes destructores que buscan solo acabar con el ímpetu del mismo Nairo. Pero agarre usted la bicicleta y pedalee sin que le importen las inclemencias del clima, sea frío o calor.
Agarre usted la bicicleta y pedalee tres, cuatro o hasta cinco horas –o más- sin descanso. Agarre usted la bicicleta, madrugando, durante tres semanas y pedalee contra el tiempo. Agarre usted la bicicleta y pedalee para ascender montañas empinadas, o bajarlas con carreteras mojadas.
Difícil intentar al menos una de las cosas anteriormen- te mencionadas. Ahora, imagínese usted hacer todo eso a la misma vez, pensando, además, en que a su lado hay más de 100 personas persiguiendo la misma meta que usted.
Ahí no acaba todo. Agarre usted la bicicleta con el peso de la ilusión de millones de compatriotas que anhelan ver la bandera de su país ondeándose en lo más alto de un podio hecho únicamente para gladiadores que –claro está- nunca dejan de ser seres humanos, y si se cree capaz de lograr lo que un Nairo ha conseguido (tres veces podio en el Tour), agarre usted la bicicleta y demuéstrelo, aunque seguro ya no querrá hacerlo
Agarre usted la bicicleta con el peso de la ilusión de millones de compatriotas que anhelan ver la bandera de su país ondeándose en lo más alto de un podio hecho únicamente para gladiadores.
* Taller de Opinión es un proyecto de El Colombiano, EAFIT, U. de A. y UPB que busca abrir un espacio para la opinión joven. Las ideas expresadas por los columnistas del Taller de Opinión son libres y de ellas son responsables sus autores. No comprometen el pensamiento editorial de El Colombiano, ni las universidades e instituciones vinculadas con el proyecto.