Reclaman control a vías del Suroeste
En vista de que en las últimas semanas se han presentado atracos y hechos de orden público en las carreteras del Suroeste, el gobernador de Antioquia, Luis Pérez, realizó ayer una visita sorpresa a la región y concretamente al municipio de Concordia, donde hizo énfasis en la seguridad.
Pérez manifestó que a pesar de haber compartido con la Administración Municipal y los líderes de la localidad temáticas diversas, su prioridad es llevarles un mensaje de tranquilidad de que no se les permitirá a los delincuentes que avancen en su accionar contra los ciudadanos.
“Hablamos sobre muchas obras públicas, pero mi visita intempestiva se debió a que en las últimas dos semanas se han dado algunos atracos en la carreteras y quisimos traer a los generales de la Policía y el Ejército para que la comunidad esté tranquila de que el proceso está avanzado y les vamos a echar mano a esos delincuentes”, expresó.
Exigió a las autoridades actuar pronto, “porque cuando una bandita se mete a un municipio o carretera y se deja libre, se puede convertir en muy poderosa y va a ser muy difícil derrotarla”.
El último asalto ocurrió en la noche del pasado 23 de diciembre, cuando entre seis y diez vehículos fueron detenidos en un retén ilegal en el sitio La Selva, de Concordia, y sus conductores y ocupantes robados por la banda.
Los sujetos, igual que en otros atracos anteriores ocurridos en el Suroeste, en la zona del Sinifaná, vestían camuflados, botas y pasamontañas, según relataron varias víctimas en comunicación con EL COLOMBIANO.
Los individuos actuaron en la total impunidad, porque salieron a la vía en un sector selvático, sin casas alrededor, a altas horas de la noche y en una zona donde no hay señal para los celulares.
El secretario de Gobierno de Concordia, Juan David Res
trepo, confirmó los hechos y manifestó que tras las denuncia, con la Policía se desplazó al sitio para tratar de interceptar a los asaltantes.
El comandante de la Policía de Tránsito de Antioquia, mayor Sergio Saavedra, señaló que se adelantan labores de patrullaje y de persecución.
Algunas mujeres denuncian que los atracadores les hacen quitar las camisas y hurgan entre sus brasieres para buscar celulares y otras pertenencias