HORA CERO
Un año después: ¿Qué nos gustaría acabar en Medellín? El turismo sexual y la inseguridad. Los camiones y chimeneas de humo que nos ahogan y las licencias que se otorgan para cortar árboles y poder construir más centros comerciales. ¿Qué queremos ver? Más gente leyendo en parques, más respeto a los mayores y conciertos de grupos, sinfónicas y Red de Bandas. Más nobleza en las calles y que no importe ese qué dirán paisa que aliena e inhibe. Que la Historia vuelva a enseñarse en colegios, eventos y recintos porque se quiere, protege o evita lo conocido. Esta semana en el programa Voces RCN, hablaron los profesores y periodistas Luz María Tobón y
Henry Horacio Chaves a propósito del primer año del alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez. Ambos coincidieron en que una de las tareas para este 2017 será gobernar, es decir, dirigir de forma estructurada el destino de esta ciudad ya que de acuerdo con lo afirmado en ese espacio, las acciones ejecutadas por él hasta hoy las perciben como piezas sueltas de un rompecabezas. Opinaron que la seguridad también es responsabilidad del gobierno de Santos, porque si ofrece más oportunidades, la vida será más atractiva que la delincuencia. Henry Horacio destacó los avances en las Pruebas Saber y el aumento en el turismo y empleo. Entre los retos para el 2017 mencionó la movilidad, asegurar para dónde vamos y definir el gasto público que creció en un 18 por ciento en solo este año. Luz María agregó que es necesario transformar la salud y la educación. ¿Y qué hará cada uno de nosotros por mejorar esta ciudad?
Capturar la luz: Un año es una reunión de momentos y uno de los que más disfruté fue acompañar al profesor Alejan
dro Cartagena a ver aves con los niños del colegio donde trabajamos. Ver de cerca la naturaleza nos permite apreciarla y cui- darla. Esa experiencia me hizo recordar al fotógrafo Louie
Schwartzberg quien lleva más de treinta años tomando imágenes de colibríes, flores nacientes, hongos, mariposas monarca o de la bóveda celeste en una noche estrellada. Hijo de sobrevivientes del Holocausto, dice que siempre ha sentido la necesidad de lograr que el mundo sea un lugar mejor. Al empezar cada día imagina “cómo capturar la luz” para que otros piensen y sientan. Uno de sus propósitos es mostrar que “todo está conectado, incluso los pequeños como abejas y flores”. Si se afectan, lo estaremos también. Estar más en la naturaleza y menos en los centros comerciales, permitirá entender y proteger ese mundo que los humanos estamos destruyendo rápidamente.
Bajo la luz plateada del 31 a las doce: Uno de los problemas de ciertas teorías de emprendimiento es que asocian la idea del éxito personal con crecimiento económico. Cuanto más dinero y objetos tenga alguien, se piensa que mejor está. En su libro “Sabiduría ancestral, mundo moderno”, el
Dalai Lama dice que la prosperidad también puede medirse por la calma de una persona. Ojalá que dentro de un año y bajo la luz plateada de la hora cero, tener más no haya sido norma y haber estado tranquilo sea una de esas ganancias privadas y latentes
¿Qué nos gustaría acabar en Medellín? El turismo sexual y la inseguridad. Los camiones y chimeneas de humo.