Dólar e inflación, sorpresas de 2016
Las sorpresas que se dieron el año pasado respecto a lo que vaticinaron analistas desde finales de 2015, corrieron por cuenta de dos indicadores claves de la economía: dólar e inflación.
De manera indirecta, también incidieron sorpresas como el triunfo de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, la salida del Reino Unido de la Unión Europea en el denominado brexit y el triunfo del No en el plebiscito en Colombia.
Pero solo en lo económico, la Tasa Representativa del Mercado arrancó 2016 en 3.149,47 pesos, con estimaciones como las de Anif, que planteaban un dólar de 3.200 pesos.
Sin embargo, eso no pasó y nadie se esperaba que la divisa se trepara en febrero a máximos históricos, hasta 3.434,89 pesos, como ocurrió el 12 de febrero. Fue reflejo de la caída en el precio de petróleo, hasta 26 dólares y eso no estaba en las cuentas de nadie.
Asimismo, la alta volatilidad de la divisa se mantuvo durante el año, porque después de este pico pasó a registrar un mínimo de 2.817 pesos, en octubre.
“La recuperación del peso en la segunda mitad del año reflejó un cambio de tendencia en términos de intercambio y ajuste del déficit en cuenta corriente”, afirmó Bancolombia en su Informe de Proyecciones Económicas.
En cuanto a la inflación, se disparó a una tasa anualizada a julio fue de 8,97 %: “eso no lo previó en 2015 ni el más pesimista de los analistas”, destacó Orlando Santiago, gerente de la firma Fénix Valor.
De hecho, la expectativa del equipo técnico del Banco de la República a finales de 2015 es que en el primer semestre de 2016 la inflación anualizada se movería entre 6,3 % y 7 %, lo que desfasó los pronósticos del año pasado.
Los impactos del fenómeno de El Niño y el paro camionero se reflejaron en el precio de alimentos, que pesa 28,2 % de la canasta. Luego este rubro moderó su variación anual.
Se espera que los fenómenos externos que influyeron en el desfase del año pasado, también sean protagonistas este 2017