Diseño excepcional y pantalla increíble por una alta inversión
Aprimera vista el Moto Z es un teléfono con un diseño excepcional: líneas cuidadas, un panel posterior hermoso, un equipo sumamente delgado y liviano (prácticamente no se siente al llevarlo en el bolsillo). Al incluir en la caja un Moto Style Shell ( la carcaza trasera), Lenovo corrige un defecto del que sufren muchos de los teléfonos de última generación: una cámara que sobresale del panel trasero, haciendo más factible que sea lo primero que sufra en una caída; es imprescindible usarlo siempre que no se tenga conectado otro Moto Mod.
Adicionalmente la desaparición del puerto de audio tradicional en favor del USB- C constituye una ventaja de diseño que, al mismo tiempo, lo pone en la punta de lanza para conectarse a los más recientes accesorios. Y para los que aún conservamos algún manos libres con conector de audio tradicional, la caja incluye un convertidor de este tipo de conector al mencionado USB-C.
Moto Mods para lo que quiera
Los Moto Mods constituyen la verdadera innovación del Moto Z: poder agregar fácilmente un proyector ¡de hasta 70 pulgadas!, una cámara con un lente semiprofesional, una batería externa o un altavoz JBL a la parte posterior del teléfono y usarlo al instante, sin necesidad de reiniciarlo, son una mejora de años luz a la experiencia móvil de hoy. Esto sin considerar que vendrán muchos más Moto Mods con funciones inimaginables (gracias a su apertura a los desarrolladores) y que además serán retrocompatibles (no se necesitará cambiar el teléfono comprado hoy para usar aquellos que vendrán), hace que la línea Moto Z sea diferente a cualquiera ofrecida por Lenovo y sus competidores.
Cámara para el día a día
Si bien Lenovo no se ha caracterizado por tener las mejores cámaras, el salto funcional en esta generación es notable. Unas cámaras que ofrecen grabación de video en 4K o slow-motion, flash para tomas frontales y dual led en la cámara principal que se adapta al contexto y mejora las tonalidades de la fotografía, personalización de las opciones profesionales y un sistema de enfoque laser ultrarrápido hacen que el Moto Z sea un competidor serio en la guerra de la fotografía móvil.
Por mejorar
Con una batería con una vida promedio de 7 horas, no es un teléfono con el que pueda sobrevivir una de mis jornadas laborales. Lenovo ha solucionado este asunto, como lo hizo con la Moto Shell para el problema de diseño de la cámara, integrando en las cajas el Moto Mod de batería externa Incipio OffGrid; este Mod promete ampliar a más del triple la vida promedio de la batería pero ¿por qué querría llevar siempre conectado un accesorio que daña la línea de diseño y hace mucho más pesado mi teléfono?
En el contexto local de los gama alta, sigue siendo una inversión muy alta (sobre todo, creería yo, por los Moto Mods que trae por defecto). ¿Podrá ser una mejor estrategia venderlo por separado para bajar su precio? ¿O tal vez permitir que el usuario elija los Moto Mods que vienen en su caja?
En conclusión el Moto Z es un teléfono maravilloso para un tipo de usuario muy específico: aquel que encuentra en los Moto Mods un valor agregado suficiente para pasar por alto el que, en el resto de las características, no se diferencie sustancialmente de las otras alternativas de gama alta del mercado. Yo sí que lo usaría, soy parte de ese nicho que ve en un proyector, un altavoz externo y un lente profesional, grandes aliados para la vida cotidiana