¿Por qué no desmontan vallas en Las Palmas?
Acciones judiciales emprendidas desde 2007 para desmontar vallas a lo largo del corredor no han conseguido su objetivo.
Envigado y Medellín atienden acciones legales que piden desde hace 10 años que se hagan cumplir las normas.
Una valla no debería estar a menos de 250 metros de otra ni a menos de 250 metros de una curva en carretera, y tampoco a menos de 15 metros del borde de la calzada; lo dice el artículo 12 de la Ley 140 de 1994. Diversas acciones legales a partir de esta norma tienen a Medellín y Envigado revisando la legalidad de aquellas dispersas en el paisaje a lo largo de la vía Las Palmas.
En Medellín y Envigado, municipios que atraviesa la doble calzada, se siguen procesos que deberían terminar con el desmonte de las vallas que falten a las normas. Aunque en la mayoría de los casos todavía no se concretan en acciones.
“Hace treinta años, era un placer subir por la vía Las Palmas una vez dejaba atrás la contaminada Medellín. Hoy, esta joya se parece más a la entrada a la ciudad de Las Vegas (Estados Unidos) con una carretera invadida de publicidades ilegales, hasta luminosas, tapando el paisaje”, lamenta Michel Taverniers, ciudadano belga residente en Medellín, quien ha liderado desde 2007 numerosas acciones legales buscando el desmonte de las vallas en todo el recorrido de la carretera.
Tiene entre sus argumentos una sentencia de 2009 de la juez primera administrativa de Medellín e informes de la Policía Nacional de Carreteras en 2010 y de la Contraloría General de Medellín en 2009 y 2011.
Los procesos
La Subsecretaría de Espacio Público de Medellín conoce los reclamos de Taverniers e incluso señala que ya se ha procedido con el desmonte de algunas vallas en la vía Las Palmas.
“Se viene dando cumplimiento y garantía al debido proceso para los empresarios que pautan en esta vía. Se mantiene informado al inspector encargado para que desmonte vallas que no cumplen con los requisitos”, señaló esta dependencia de la Secretaría de Seguridad y Convivencia.
“Tenemos vallas con registros y otras con procesos de solicitud, como también otras que no cumplen y que están en proceso de inspecciones para su desmonte”,
concluyó este despacho.
En Envigado, el director de Planeación, Esteban Salazar, señala que el Municipio ha adelantado el inventario de la publicidad en su jurisdicción. “Ya tenemos conocimiento exacto de cuáles son las que cumplen y las que no cumplen”, dijo. El Concejo de Envigado dará trámite en sesiones extraordinarias, entre enero y febrero a un proyecto de acuerdo para actualizar la reglamentación de la publicidad visual exterior.
“Ese acuerdo establecería las herramientas para nosotros poder hacer directamente los desmontes de estas vallas y cobrárselos a los que están haciendo la infracción, más las sanciones y multas”, precisó el funcionario.
Agregó que se han limitado algunas solicitudes en la zona, con la tarea pendiente de resolver la problemática.
En el año 2010, Taverniers contabilizó 121 vallas dispuestas entre el Hotel Intercontinental y la glorieta de Sancho
Paisa. En seis años se redujeron a 80, a la par con el desarrollo urbanístico que ha tenido la zona. Para el año pasado, nuevos proyectos en Envigado llevaron a desmontar cuatro vallas.
“Lo más preocupante no es la contaminación visual ni el peligro vial que representan numerosas vallas instaladas en curvas peligrosas, sino la degradación moral y ética de funcionarios, jueces, magistrados y políticos que permiten una creciente cultura de la ilegalidad. Ya el incumplimiento de las leyes se banalizó y no molesta a casi nadie”, agrega Taverniers, demandante en múltiples acciones populares por la ubicación de las vallas y procesos contra los funcionarios que no toman acciones para su desmonte si están por fuera de las normas