Al tiburón del Atlantis lo cuidan en el parque Explora.
El espécimen es un bebé que está en proceso de adaptación. Estará en el parque hasta que autoridades decidan.
Alas diez y media de la noche del lunes llegó el tiburón bambú a su nueva casa de paso, el parque Explora. Un bebé que no mide más de 20 centímetros y que entró, como es protocolo, al área de cuarentena del parque.
El pequeño, explican en un comunicado de prensa de Explora, entró en condiciones estables, si bien no exentas de riesgos por el proceso que ha vivido en sus primeros días de vida. Por eso está en un área profesional restringida, a la que no podrán entrar personas diferentes a las encargadas del caso.
El parque decidió además que por ahora no dará más declaraciones, en tanto son ellos solo un espacio para cuidar del animal, que se cree nació el 28 de diciembre. “Explora reitera su misión exclusivamente educativa. No somos un espacio de simple exhibición”.
Los detalles
El tiburón bambú fue la única especie que no se sacrificó en el operativo de eutanasia de 40 peces que estaban en el acuario del centro comercial Atlantis. Al parecer se salvó porque empleados lo retiraron horas antes.
Así que el neonato estaba desaparecido, y el secretario de Ambiente de Bogotá, Francisco Cruz, anunció investigaciones. El lunes, el Ministerio de Ambiente supo dónde estaba el animal, de la especie Chiloscyllium punctatum.
“El día de ayer recibimos
comunicación por parte de un grupo de ambientalistas en la que decían que tenían al tiburón bambú y que querían hacer la entrega al Ministerio”, explicó Andrea Ramírez, directora de mares y costas del MinAmbiente.
Al mediodía lo recibieron, hicieron unas evaluaciones técnicas, y en la noche ya estaba en Explora, su nuevo hogar hasta que finalice el proceso sancionatorio, que lo realiza la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla).
Luis Gilberto Murillo, ministro de Medio Ambiente, dijo que “ya está en proceso de legalización la medida preventiva, ya que este espécimen no cuenta con los permisos ambientales para su introducción al país por ser una especie foránea. En los próximos días la
Anla se pronunciará sobre el proceso sancionatorio ambiental y el decomiso definitivo”.
Ramírez explicó que es una especie que puede estar en acuarios en condiciones específicas, en tanto crece poco, no más de un metro, y que incluso es “altamente comercializada legalmente”.
Además precisó que es un bebé que nació en el acuario, y que tan pronto puedan le realizarán otras mediciones de tamaño, peso y determinación del sexo.
Desde Explora señalaron que está en una etapa de adaptación, considerada crítica, y requiere de atención especial que “observe los requerimientos particulares de la especie”.
Por ahora nada en un lugar para él. Su casa pasajera