POR QUÉ BUZZFEED PUBLICÓ EL EXPEDIENTE
Desde que BuzzFeed News publicó un dossier de 35 páginas de acusaciones no verificadas sobre lazos entre el presidente Do
nald Trump y Rusia, he escuchado un coro de críticas de periodistas que piensan que abdicamos de nuestro papel de guardián y un coro de agradecimiento por parte de lectores que piensan que ahora pueden juzgar documentos dudosos.
BuzzFeed News decidió publicar el dossier, con el contexto apropiado y las advertencias, por dos razones relacionadas, y solo después de haber pasado semanas con reporteros en Estados Unidos y Europa tratando de confirmar o refutar afirmaciones específicas.
Primero, los documentos estaban en amplia circulación entre altos funcionarios de inteligencia y oficiales elegidos y organizaciones noticiosas. Estaban peleando por causa de ellos, y acciones se estaban tomando, en los niveles más altos del poder.
“Parece que los únicos que no sabían de este asunto eran el público”, escribió el editor periodístico Seth Lipsky en The Wall Street Journal.
Segundo, los contenidos del expediente se revelaron la semana pasada cuando CNN reportó que tanto el presidente
Barack Obama y Trump habían recibido un informe de inteligencia que incluía una sinopsis del documento, cuyas alegaciones fueron resumidas por CNN como “información personal y financiera comprometedora sobre el señor Trump”.
Nosotros en BuzzFeed, claro, habíamos considerado la posibilidad de que alguien diferente publicaría el expediente, y en ese caso planeamos añadir lo que sabíamos. No anticipamos lo que realmente sucedió: un bombazo que describió el documento, mientras que el documento en sí permanecía secreto.
Y con otras organizaciones de noticias difundiendo la alegación central del expediente -que la campaña de Trump mantuvo lazos secretos con el liderazgo ruso- nuestra decisión de publicarlo en su totalidad avanzó la historia rápidamente.
BuzzFeed News informó que las agencias de inteligencia extranjeras están investigando sus acusaciones. Si los reporteros de Washington a Budapest logran o no la verificación de sus reclamaciones, esto no le resta interés público convincente a la historia, ni quita el derecho presuntivo del público, y no solo una élite de Beltway, a ver el documento.
La administración entrante descartó a CNN y BuzzFeed, los llamó “noticias falsas”, un térmi- no usado por partisanos y cínicos para desacreditar reportes que no les gustan. El dossier es un documento real que ha venido influenciando a funcionarios, legisladores, agencias de inteligencia y, posiblemente, al nuevo comandante en jefe.
Cada usuario de Facebook se enfrenta a una abundancia de fuentes y reclamaciones. Si algo hizo la campaña presidencial reciente, fue darles a los americanos razones para leer cuidadosamente, ejercer el juicio y mirar con escepticismo lo que escuchan -incluso del hombre más poderoso en el país.
Hay un instinto, fácil de entender, a dar la espalda a este caos. Este retroceso es peligroso. En cambio, tenemos que desarrollar nuevas normas que se adhieren a los valores centrales de la honestidad y el respeto hacia nuestra audiencia. Eso significa desmentir falsedades y ser transparente con los lectores sobre nuestro proceso de reporte. A veces, significa publicar información no verificada de una manera transparente que informa a nuestros usuarios de su procedencia, su impacto y por qué confiamos o desconfiamos de ella.
Por supuesto, hay líneas que deben trazarse, y las trazamos a diario. BuzzFeed News recibe consejos falsos que conducen a callejones sin salida que no publicamos. Pero el expediente de Trump era una noticia legítima: un documento que estaba influyendo en los tomadores de decisiones en los niveles más altos. En una democracia, la justificación para proteger al público de algo así tiene que ser abrumadora. El instinto de suprimir noticias de este significado es precisamente el equivocado para el periodismo en 2017
El expediente de Trump era una noticia legítima: un documento que estaba influyendo en los tomadores de decisiones en los niveles más altos.