“Sobornos en contratación están en las regiones”
Reveló que hay cerca de 90.000 empresas que no acceden a la contratación porque la corrupción se los impide.
Juan Martín Caicedo Ferrer, presidente ejecutivo de la Cámara Colombiana de la Infraestructura (CCI), señala que aunque el escándalo de Odebrecht opaca los esfuerzos que se han dado para contratar transparente- mente los grandes proyectos de infraestructura, en las regiones el 96 % de la contratación sigue teniendo un único oferente. Subraya que los empresarios deben denunciar.
En una encuesta que la Cámara Colombiana de la Infraestructura, CCI, le hizo a 460 empresarios, se evidenció que el soborno en las regiones los industriales lo cuantifican en un 14 % del valor de los contratos. Así lo reveló su presidente Juan Martín Caicedo Ferrer, quien indicó que las coimas se están pagando a nivel regional.
En diálogo con EL COLOMBIANO señaló que espera que las obras se terminen y que la lección que le debe quedar al país tras el escándalo de Odebrecht es que la contratación se haga toda con pliegos tipo.
¿A usted lo sorprendió el escándalo de Odebrecht?
“Para mí todo esto es una paradoja que me genera tristeza, frustración. La paradoja consiste en que esta mancha que genera el caso de Odebrecht, de alguna manera, ensombrece un esfuerzo que ha venido haciendo el país para sacar adelante su infraestructura. Entonces, sí genera un sinsabor todo este escándalo, pero estoy confiado en que salgamos adelante y bien librados”.
¿Cómo salir bien librados?
“Me explico: hemos construido una institucionalidad robusta, hemos tramitado una serie de leyes que nos permiten manejar de manera más transparente la contratación en el nivel nacional. La mejor demostración de que es cierto lo que estoy diciendo es que no ha habido una sola sospecha, un solo reclamo, en relación a la forma cómo se adjudicaron las vías de Cuarta Generación. Se estandarizaron los documentos contractuales y eso facilitó la transparencia. Por ejemplo, el Invías ha realizado en los últimos años contrataciones por cerca de 8 billones de pesos con un promedio muy alto de oferentes en cada uno de los procesos. Todo esto contrasta con la mala noticia que nos genera el escándalo de Odebrecht. Hay que seguir haciendo las cosas bien en el nivel nacional aunque tenemos mucho reparo con lo que está pasando en el nivel territorial y local”.
¿Y qué está pasando?
“Revisamos 11.085 contratos por un valor de 10,35 billones de pesos y nos encontramos que en los departamentos el 76 % de los contratos conducen a únicos oferentes que terminan siendo los adjudicatarios de los contratos y en los municipios asciende al 96 % en donde la contratación tiene únicos oferentes. Hay un contraste muy fuerte entre lo que hemos logrado en el nivel nacional y lo que está pasando, desafortunadamente, en las regiones”.
¿Pero entonces en las 4G no ha habido sobornos?
“No tenemos una sola queja. No ha habido ninguna entidad de control que haya insinuado que se adjudicó alguna vía de Cuarta Generación de manera irregular. Hemos dado pasos importantes en relación con las concesiones viales, antiguamente, el concesionario podía recostarse cómodamente en el peaje y no entregar la obra, hoy no sucede eso. El nuevo modelo de concesiones
introduce una reforma en el sentido en que al concesionario no se le entregan los peajes y las vigencias futuras si no ha entregado la obra. Se va pagando en la medida en que se van entregando obras. Entonces, el escenario que tenemos es, por un lado, Odebrecht y, por el otro, el problema de contratación para únicos oferentes”
¿Qué se puede hacer?
“Hemos insistido en una formula que se puede convertir en un antídoto, que es la fórmula del pliego tipo, que los pliegos no se puedan manipular, que se estandaricen los requisitos habilitantes para evitar lo que está sucediendo, y es que discrecionalmente se manipulan pliegos licitatorios. Ese pliego tipo, de alguna manera, ya empieza a hacer carrera en el propio Congreso de la República. Esperamos que eso algún día sea ley, que podamos reglamentar la figura. Hay que ir rompiendo ese matrimonio que hoy existe entre política y contratación. Somos partidarios de la propuesta del Gobierno para la financiación estatal de las campañas. Lo que pasa es que el gamonal del pueblo financia la campaña, pero después le exige al alcalde que le retribuya con contratos el aporte que le hizo. Además, hay que hacerle reingeniería a los organismos de control de carácter local, han sido cómplices pasivos de la corrupción en la contratación regional porque se han politizado”.
Según esto, la conclusión es que los sobornos están en obras pequeñas y no en los grandes proyectos de infraestructura...
“En los dos frentes. Pero evidentemente no es una conclusión equivocada. El soborno que está asociado a que se manipulen los pliegos para contratar a los amigos políticos es un fenómeno de las re-
giones. Sin minimizar la gravedad del escándalo de Odebrecht en vías nacionales”.
Si el escándalo no hubiera estallado en Estados Unidos, ¿nos hubiéramos quedado sin saber?
“Ya teníamos unas alertas tempranas en relación al comportamiento de la firma brasileña. Es probable que a través de esos mecanismos nos hubiéramos dado cuenta, pero evidentemente las instancias de control no pueden actuar con simples indicios. Tengo una encuesta que le hicimos a 460 empresarios que pone de presente que, en el caso de los departamentos, el soborno los empresarios lo cuantifican en un 14 % del valor de los contratos. Hace poco se hablaba de una coimas del 10 %, hoy ese valor, es del 14 %, y en los municipios del 15 %. La principal víctima de esto es la pequeña y la mediana empresa de ingeniería. En Colombia tenemos cerca de 90.000 empresas de ingeniería que no acceden a la contratación porque la corrupción se los impide. Los empresarios deben comenzar a denunciar”.
¿Cuál es su expectativa frente a la obra de la Ruta del Sol? ¿Será un elefante blanco?
“Ojalá se resuelva lo que tiene que ver con la nulidad del contrato para volver a licitar y terminar esa obra. Esta es una obra, desde el punto de vista de ingeniería, relativamente cómoda, pero es un reto interesante. La tendremos que terminar algún día”
“Hay que acabar ese matrimonio que existe entre política y contratación. Somos partidarios de la propuesta para la financiación estatal de las campañas”. “Hay que hacerle reingeniería a los organismos de control locales. Han sido cómplices pasivos de la corrupción”.