¿IMPACTAMOS POSITIVAMENTE EL UNIVERSO?
El ÓSCAR de los mejores pensadores en administración, según el Finantial Times, se llama THINKERS50. El premio se fundamenta en las siguientes premisas: 1. Las ideas tienen el poder de cambiar el mundo, y 2. Una buena administración es esencial en todas las actividades humanas. El premio se otorga cada dos años y todos los grandes líderes mundiales en administración se postulan para este renombrado premio.
Por supuesto Peter Drucker, Michael Porter, Jack Welch y Tom Peters son algunos de los galardonados. Roger Martin, quien hasta hace poco fuera el Decano de la Escuela de Administración de la Universidad de Toronto y es autor, entre otros muchos libros, de “Plying to Win”, quedó de tercero en el ranquin de THINKERS50 del 2103. Fue quien acompañó a Procter & Gamble del 2000 al 2010, cuando la compañía creció de US $ 40.000 a US $ 80.000 millones, logro nada despreciable.
Una de las mayores inquietudes de Roger es cómo ayudar a las compañías a diseñar estrategias exitosas. En una entrevista que le hice recientemente, comprendí por qué THINKERS50 lo califica tan alto.
RMC: “Con frecuencia los empresarios fijan sus aspiraciones en función de las utilidades de la empresa. ¿Es lo correcto?”
RM: “Para Jack Welch trabajar en función de la maximización de utilidades es la teoría más estúpida que existe. Por otro lado Aristóteles decía que si el principal propósito de una persona era ser feliz, muy probablemente terminaría siendo infeliz. Pero si una persona se propone vivir una vida en función de los demás, contribuyendo al desarrollo de la sociedad, seguramente será muy feliz. Igual para las empresas. Si el propósito de una compañía es tener un grupo de clientes y satisfacerlos de manera excepcional, respetando lo que ellos esperan de la compañía, sin duda esos accionistas recibirán muy buenos dividendos. Un buen ejemplo es Johnson & Johnson. El CREDO propuesto por Robert Wood Johnson en 1943 está enraizado en su cultura: “Nuestra primera responsabilidad es con los médicos, enfermeras y pacientes, con las madres, padres y todos aquellos que usan nuestros productos y servicios. Para satisfacer sus necesidades, todo lo que hacemos debe ser de la más alta calidad…”. Al final dice: “Nuestra última responsabilidad es ante nuestros accionistas”. Y ellos pueden estar tranquilos, pues al hacer bien lo primero, siempre ganan dinero para repartir a los accionistas. Por lo anterior se deben fijar las aspiraciones en actividades, productos, servicios buenos para la sociedad; las utilidades llegarán si se hacen bien las cosas”.
RMC: “¿La aproximación al trabajo estratégico debe ser con mucha racionalidad o predominio de la creatividad?”
RM: “Aristóteles es sin duda el primer científico de la humanidad. Él fue el primero en pensar en causa y efecto. Hacía énfasis en la importancia de las pruebas, la información y la racionalidad. Sin embargo sostenía que solo con la imaginación podíamos mejorar nuestro entorno. Steve Jobs decía: ¿Si no impactamos positivamente el universo, a qué vinimos? Y él lo logró gracias a su creatividad”
Mi conclusión: ¿Si no utilizamos la creatividad para imaginar un mundo mejor, para qué hacemos estrategia?