Ineficiencia en el sistema tributario
El sistema tributario en Colombia se ha concentrado en gravar a las sociedades. Mientras que en los países que hacen parte de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde) el 72 % del recaudo de los impuestos directos proviene de las personas naturales, en Colombia es sólo el 17,4 %. Lo que se observa es una elevada tasa efectiva de tributación (TET) a las sociedades. Colombia es el tercer país de América Latina con la mayor TET a las sociedades (69,8 %). Esta también es la más elevada frente al promedio de los países de la OCDE (40,7 %). En ese contexto, algunos inversionistas, en particular los internacionales, tienen en cuenta los impuestos a los dividendos junto con el impuesto de renta. En ese frente, Colombia está en niveles similares a la Ocde. Por tanto, el problema se concentra en una alta tasa de renta a las personas jurídicas y las altas tasas efectivas de tributación a las empresas. De hecho, el impuesto a la renta está concentrado en pocos y prueba de ello es que solo 3.441 empresas pagan 68 % del recaudo de renta, y 21 % del recaudo total. Dado que la reforma tributaria no amplió el umbral en el impuesto de renta para personas naturales, este tributo seguirá concentrado en unos pocos. Así que el sistema debería lograr mayores aportes de las personas naturales, siguiendo la tendencia mundial. Por el lado de impuestos indirectos, la productividad del IVA es de 35,1 %, por debajo del promedio de América Latina y de la Ocde(42,1 %y 36,9 %, respectivamente). Se debe a múltiples exclusiones y exenciones, a las tarifas reducidas y del alto grado de evasión y elusión. La reforma tampoco resolvió los problemas estructurales del IVA. Aunque puede ser apresurado, corren voces que dicen que se requerirá otra reforma tributaria Desde el punto de vista de la competitividad, es clave que esa nueva reforma, cuando venga, realmente sea estructural.