Los hits de la música clásica
Hay obras que se tocan con más frecuencia en la ciudad. Otras, aunque también son hits, requieren de más trabajo para interpretarse.
Como en la música popular, la música clásica también tiene sus éxitos, esos que el público espera que las orquestas interpreten por lo menos una vez al año y que hacen que los aplausos se prolonguen al final del concierto o que alguna parte de la melodía se les quede a los asistentes en la cabeza.
En Medellín, el público de las tres principales orquestas – Sinfónica de Eafit, Filarmónica de Medellín y Sinfónica de Antioquia– está acostumbrado a escuchar obras como Las Cuatro Estaciones de Vivaldi, Carmina Burana, la Quinta Sinfonía de Beethoven o alguna de las sinfonías de Mozart.
Que las toquen con frecuencia se debe a diferentes razones. Para Andrés Felipe Jaime, director de la Sinfónica de Antioquia, las que tienen la combinación coro, solistas y orquesta causan un impacto emocional en la gente. Eso mismo cree la maestra Cecilia Espinosa, directora de la Orquesta Sinfónica Eafit.
“Los músicos y el público tenemos una conexión más grande con los instrumentos que se popularizaron y que cuentan con más repertorio”, señala la maestra.
En ese sentido, entre las obras que escogen las orquestas para cada temporada es muy común encontrar los conciertos para piano, violín y violonchelo. Además, hay otra razón para ello, los compositores clásicos se concentraron, sobre todo, en hacer conciertos para esos tres instrumentos.
Que toquen esos repertorios también obedece a la disponibilidad de las partituras. Según Carlos Ágreda, director de orquesta, el repertorio que se programa es “el gratuito”, porque muchas orquestas no tienen los fondos suficientes para arrendar las partituras de las obras contemporáneas, es decir las del siglo XX en adelante, entonces usan las de periodos anteriores como el romanticismo, el postromanticismo, el barroco y el clásico.
Las tres orquestas que se destacan en Medellín no pueden compararse, cada una tiene una trayectoria distinta y ha ido alcanzando metas que, en general, le han subido el nivel musical a la ciudad. Indiscutiblemente sus interpretaciones son más maduras ahora.
Una prueba de ello es que la Sinfónica Eafit se haya unido con la Red de Escuelas para interpretar la Sinfonía N°6 de Mahler. De otra forma no se hubiera logrado porque, aunque la obra es de esas que el público quiere escuchar, requiere de una orquesta muy numerosa.
Ramiro Isaza, profesor de historia de la música, cree que sinfonías como las de Bruckner o Mahler, que también son muy exitosas, se escuchan con menos frecuencia, pero que, por ejemplo, la Filarmónica de Medellín, por el número de músicos e instrumentos que tiene, ya puede hacerlo