Parquímetros para tres nuevas zonas
Se instalan ZER en Manila, Parques del Río y Ciudad del Río a partir del 17 de abril. Ya son 19 en Medellín.
Hay muchas calles de Medellín que, habiendo sido construidas para el flujo de vehículos, paradójicamente son estos los que obstruyen el paso, pues las tomaron de parqueadero, lo que constituye un factor que colapsa la movilidad, como ocurre en Conquistadores, Manila y Ciudad del Río, lo que obligó a las autoridades a cobrar el parqueo en estas zonas.
En los tres sitios, la Secretaría de Movilidad decidió instalar Zonas de Estacionamiento Regulado (ZER ) o parquímetros. La medida empieza a regir el 17 de abril.
En Conquistadores, sector de Parques del Río, la congestión es constante, en parte porque esta obra generó en el lugar un parqueo descontrolado. Así lo siente Asdrúbal Rincón, un señor de 74 años a quien se le acabó la paz que disfrutaba en su apartamento del edificio Venus, en la carrera 63B con calle 37.
“Nada ganamos con que la Alcaldía cobre el parqueo, porque los perjuicios son para nosotros, pero la plata se la lleva el gobierno”, expone y señala que en el sector ya han tenido reuniones para evaluar el tema, pues esta decisión no fue consultada con la comunidad, dice.
Gustavo Amaya, residente en la calle 36, edificio El Paraje, advierte que un cáncer de la ciudad es el mal parqueo en las calles: “las vías son para transitar, no para dejar el carro ahí, y acá todo el mundo se acostumbró a dejar el automóvil en la acera, violando las normas sin control”, señala. Afirma que hasta le obstruyen, muchas veces, el ingreso y salida de su unidad.
Mala costumbre
Iván Sarmiento Ordosgoitia, profesor del Departamento de Ingeniería Civil y experto en movilidad de la Facultad de Minas de la Universidad Nacional, califica el parqueo irregular como un mala costumbre: “Hay que cambiar esa cultura de estorbar en las calles, y menos en vías de servicio, con paso de buses, porque se afecta la movilidad”, dice.
Advierte que cuando un vehículo no está circulando debe estar en un garaje o en un estacionamiento, aunque admite que hay muchas zonas de alto flujo que carecen de parqueaderos.
En Ciudad del Río, el parqueo es caótico. La carrera 43F, en todo su recorrido hasta la calle 20, Barrio Colombia, es un gran garaje vial en el que nadie hace caso a las señales de prohibido. Ambos lados son invadidos y una vía de tres carriles se reduce a uno.
“Me parece excelente que regulen el parqueo, por acá se obstruye mucho el paso cuando hay eventos y los fines de semana”, señala Angé
lica Medina, vecina del sector. Igual situación se da en el barrio Manila, de El Poblado, donde varias carreras y calles son objeto de invasión.
Sin embargo, el cobro preocupa a algunos residentes, como la señora Carmenza Án
gel, quien dice que le tocará no volver a visitar a su prima, “porque no voy a tener cómo pagar”.
Juliana Serna, empleada de una barbería, sostiene que el negocio decaerá, porque “los clientes no tendrán para pagar motilada y parqueo”