Red trabaja en prevención del abuso sexual
En 2016 se reportaron en Medellín 1819 casos. Experta sugiere generar más confianza en los niños y escucharlos.
Para enfrentar el flagelo del abuso sexual , en Medellín existe una red de protección que busca prevenirlo y ofrecer una respuesta adecuada desde los diferentes estamentos cuando se presenta el hecho.
Luis Bernardo Vélez, secretario de Inclusión Social de Medellín, sostuvo que la ruta busca brindar acompañamiento jurídico y sicológico a la víctima y sus familiares.
La estrategia de la Administración Municipal incluye equipos especializados de atención en los territorios para identificar los casos y acompañamiento sicosocial a las familias con niños y adolescentes víctimas de los delitos sexuales, entre otros.
Este problema es uno de los retos de Medellín, porque, según los datos oficiales más recientes, aumentó en 25 % el número de registros de casos de abusos sexuales en la ciudad en los dos últimos años.
La información del Sistema de Vigilancia en Salud Pública, Sivigila, reporta que se pasó de 1462 en 2015 a 1819 el año anterior.
De los reportados en 2016, el 76 % son menores de edad.
Confianza y tranquilidad
Pero ¿qué recomiendan los expertos para evitar los abusos?
Viviana Henao Cárdenas, directora del proceso de atención a las familias, de la Fundación Ximena Rico Llano, sostuvo que es clave generar confianza con los menores cuando están creciendo, “para que ellos puedan contarnos lo que les ocurre, qué hicieron con las personas cercanas”.
Recomendó a los adultos estar tranquilos frente a los contenidos que vayan expresando los menores. “Si el niño percibe al adulto tenso, angustiado, con rabia, no nos van a confiar las situaciones”.
Esa fundación trabaja con menores de cinco años y sus grupos familiares, en asuntos como la promoción y la prevención de la salud física, mental y emocional de los niños.
Factores de riesgo
Los menores de edad son más vulnerables a los abusos sexuales, en algunos casos el en-
torno desfavorece y a veces la víctima queda indefensa ante el abusador o los abusadores.
El concejal Ramón Acevedo recordó que existen factores de riesgo como, la pobreza que obliga a los padres de familia a buscar el sustento diario dejando a los menores al cuidado de personas poco preparadas para asumir esta función y, en algunos caso, poco confiables.
A ello se suma, en ocasiones, la discapacidad física y mental del niño, lo cual aumenta su vulnerabilidad, así como el consumo de alcohol y las drogas por parte de algún miembro de la familia.
De igual manera, padres o
Más acciones
El concejal, Jaime Mejía pidió mayor efectividad en la judicialización, y mejores resultados de las estrategias y acciones adelantadas.
Indicó que de los 8.357 denuncias presentadas entre 2013 y 2016, el 55 % está en investigación, el 40 % precluyó y solo el 5 % registra condena.
Al respecto el subsecretario Andrés Tobón, expresó que las secretarias de Inclusión Social, Salud, el Icbf y las comisarías de familia, entre otros, trabajan para que los casos judiciales no tengan dificultades.
Tobón expresó que existen retos. “Muchos procesos se caen por fallas en los procedimientos, en la recolección de las pruebas. Las víctimas no denuncian, algunas retiran los cargos por miedo”.
Sitios rojos
La concejal Daniela Maturana reiteró que el desafío es muy grande y señaló que la ciudad conoce cuáles son esos sitios de Medellín calificados como zonas rojas. “La avenida 33 y la comuna de la Candelaria, entre otros”.
Un documento de la secretaría de Seguridad y Convivencia de la Alcaldía de Medellín reseña que el Parque Lleras es uno de los puntos
Desafíos
Andrés Tobón invitó a la ciudadanía para que continúe informando, porque “el subregistro en materia de delitos sexuales en Medellín es gigantesco”.
Sobre la visibilidad de la problemática, el concejal Ramón Acevedo manifestó que los números difundidos son la punta del iceberg. Falta camino por recorrer porque se trata de un abuso que a veces, no es acompañado de violencia física.
El desafío de atacar la problemática también está relacionada con la forma como el niño y el adulto comparten y, allí es clave la diversión.
Juegos que inviten a los infantes a reconocer su cuerpo, las partes que pueden exponerse y “explicarles con los amiguitos hasta qué punto puede accederse a los genitales y a la boca. Abordar el tema de las emociones, las situaciones que pueden generarnos tensión también a través del juego”, puntualizó la sicóloga Viviana Henao