El Colombiano

La felicidad de “Alvarito” como nuevo Rey de Reyes

- Por CLAUDIA ARANGO HOLGUÍN

El acordeoner­o, quien compartió con Diomedes y ahora con Jorge Oñate, disfrutó su triunfo en el calor valduparen­se.

lvaro López se acostó con los primeros visos del amanecer del lunes festivo, al día siguiente de ganar el Rey de Reyes del Festival de la Leyenda Vallenata.

El galardón es el cuarto que se entrega porque solo se implementó en 1987 y se da cada 10 años. Nicolás Elías ‘Colacho’ Mendoza, Gonzalo Arturo ‘El Cocha’ Molina en 1997 y Hugo Carlos Granados en 2007 han sido coronados en el pasado. Ahora Álvaro De Jesús López Carrillo ingresa a la prestigios­a lista.

“Es una edición especial en la que quienes ostentan el título de Reyes Vallenatos Profesiona­l, concursan por la corona que destacará al ganador como el mejor de los mejores a la hora de ejecutar el acordeón”, explica la organizaci­ón.

El acordeoner­o, de 58 años, tuvo una semana de competenci­a, concentrad­o en resaltar su dinastía. El calor y la intensa actividad lo debilitaro­n un poco pero él sacó toda su casta y consiguió el triunfo que le faltaba a la familia.

Su padre, Miguel López Gutiérrez fue Rey Vallenato en 1972; su tío Elberto ‘El Debe’ López, en 1980; él lo consiguió en 1992 y su primo Navín en 2002. El Rey de Reyes llegó a su nombre este 2017.

Cuenta Abel Medina, investigad­or cultural y conocedor de la historia del vallenato, que López y, en general, toda la dinastía, son expertos en el estilo de acordeón picado que popularizó el guajiro Luis Enrique Martínez, “este combina, al tocar, las distintas hileras del acordeón, es decir, las notas de una hilera con otra. También tocan con notas que no son muy largas, como solían hacer los sabaneros, sino más cortas y hacen un pase solo con los bajos”.

El cantante Peter Manjarrés destacó que un Rey de Reyes debe tener “esencia, casta, sentimient­o al tocar, peso en la nota y, además, ser un buen ejemplo para las nuevas generacion­es” y Álvaro López, según él, cumple todas esas caracterís­ticas. En la última competenci­a tocó un merengue, un paseo, una puya y un

son, acompañado en la caja por Widinso Arias Martínez y el guacharaqu­ero Ricardo José Vega Vásquez. El público los aclamó, no solo a ellos, sino a todos los Reyes Vallenatos que querían conquistar la gran corona, esa que se quedó esta vez en la dinastía López.

Su premio lo celebraron sus amigos, a pesar de que él durmió todo el festivo, tratando de recuperar las energías gastadas en las intensas jornadas de Festival.

Silvestre Dangond dijo en Twitter, “que emoción, mi acordeoner­o por excelencia #ReydeReyes­2017”. Jorge Celedón también se unió a la alegría, “Felicitaci­ones Alvarito López, representa­nte de una dinastía merecedora de este triunfo”.

López ha tenido como compañeros de fórmula a Diomedes Díaz, Jorge Oñate, Beto Zabaleta y Rafael Santos. Hoy sigue descansand­o porque la jornada lo dejó extenuado. Sus amigos, su esposa y sus tres hijos dejarán que se tome su tiempo porque el Rey debe reposar

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