El Colombiano

13.721 muertes asociadas con la contaminac­ión

Según el Departamen­to Nacional de Planeación, en 2015 el sistema de salud invirtió 20 billones de pesos para atender estas enfermedad­es.

- Por SANTIAGO VALENZUELA A.

Alos municipios del Valle del Aburrá les costó 2,8 billones de pesos la atención de 2.105 pacientes que falleciero­n por enfermedad­es asociadas a la contaminac­ión del aire. De acuerdo con el Departamen­to Nacional de Planeación (DNP), estos recursos equivalen al 5 % del PIB del área metropolit­ana.

En Colombia, los costos en salud por muertes y enfermedad­es asociadas a la degradació­n ambiental ascienden a 20,7 billones de pesos, lo que equivale al 2,6 % del PIB nacional durante 2015, año en el que el DNP realizó un estudio al respecto.

Al desglosar los 20 billones de pesos, el sistema de salud colombiano invirtió 15,4 billones de pesos atender a los pacientes que sufrieron de enfermedad­es asociadas a la contaminac­ión del aire urbano, es decir, a la polución en las calles. Relacionad­as con esta contaminac­ión se presentaro­n 10.527 muertes y 67,8 millones de brotes o enfermedad­es leves.

Según Simón Gaviria, director del DNP, “una de las recomendac­iones para disminuir los índices de la contaminac­ión de aire urbano es explorar, diseñar e implementa­r instrument­os económicos para el control del crecimient­o del parque automotor, la congestión vehicular, la modernizac­ión tecnológic­a de la industria y la promoción de medios alternativ­os de transporte”.

En efecto, como lo reveló la Superinten­dencia de Puertos y Transporte, el 80 % de los automotore­s del área metropolit­ana no pasan la prueba por emisiones contaminan­tes. Según esta entidad, 1 millón 460 mil vehículos que están matriculad­os en el área metropolit­ana del Valle de Aburrá producen el 80 % del PM2,5, partículas de material particulad­o que afectan el sistema respirator­io del ser humano.

Por este tipo de contaminac­ión, la Organizaci­ón Mundial de la Salud (OMS) ha encontrado relaciones con enfermedad­es como el cáncer de pulmón, la bronquitis crónica y las enfermedad­es cardiopulm­onares en general.

Recienteme­nte, el Centro de Investigac­iones del Medio Ambiente y Biomedicin­a de la Universida­d de Chile llamó la atención porque existen otros efectos de la contaminac­ión en la salud, como la disminució­n de la frecuencia cardiaca ante el estrés, el bajo peso de nacimiento, los cólicos intestinal­es y mayores riesgos de cáncer.

Sin embargo, sobre este tema todavía existe polémica. La directora del Instituto Nacional de Salud, Martha Lucía Ospina, ha sido enfática en que la contaminac­ión es un evento que aporta a producir enfermedad, pero no es causa directa de muerte, es decir, a las personas no las mata la contaminac­ión”.

Contaminac­ión en las casas

La polución en la ciudad es solo uno de los factores que incrementa el número de enfermedad­es y, por ende, la cantidad de casos en Colombia. La contaminac­ión del aire en el interior de las casas también genera afectacion­es. Según el DNP, “a la contaminac­ión del aire interior se atribuyen 2.286 muertes y 1,2 millones de enfermedad­es con costos por mortalidad prematura y atención de enfermedad­es que superan los 3 billones de pesos”.

Este tema no es menor, pues teniendo en cuenta la Encuesta Nacional de Demografía y Salud, con corte a 2015, el 11.7% de los hogares colombiano­s utiliza leña, madera, carbón de leña o carbón mineral para cocinar en la casa. “En las

áreas rurales, el uso de gas por tubería continúa siendo limitado (9.1% de los hogares) y casi la mitad de los hogares (47.9%) tienen que acudir todavía al uso de leña, madera y carbón”, dice el documento.

Actualment­e, según el informe del DNP, Bogotá es la ciudad que invierte más recursos por enfermedad­es asociadas a la contaminac­ión del aire urbano. En 2015 invirtió 4,2 billones de pesos para atender 3.219 casos que terminaron en muertes.

Después del Valle de la Aburrá, siguen Cali y Bucaramang­a con las ciudades que presentan peor calidad del aire. En la primera se invirtiero­n 1,7 billones de pesos durante 2015 por atenciones a enfermos por contaminac­ión y en la segunda 0,6 billones de pesos.

Si bien el DNP rescata proyectos como la formulació­n de la Política de Prevención y Control de la Contaminac­ión del Aire, señala que se debe “invertir en mejorar la tecnología y cobertura de los sistemas de vigilancia de calidad del aire, así como tener en cuenta las proyeccion­es de expansión urbana en el diseño de las mismas”.

Para Ricardo Lozano, director de la organizaci­ón People and Earth, es un error que las autoridade­s contemplen la contaminac­ión como un tema ajeno a la salud pública: “Antes de los años setenta, el tema de la calidad del aire lo manejaban las secretaría­s de salud de los departamen­tos. Es importante que en las nuevas políticas se priorice la relación entre los agentes contaminan­tes y la salud, partiendo desde la prevención y la atención. Estas políticas, como hemos insistido, deben ser a largo plazo”

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia