Zoom desde el cine
tos, es una conversación. Desde que inicié la escritura del guion tuve en cuenta de manera estratégica cómo se iba a contar la historia y a crear esos contrastes donde se ve que es una sola película y no tres cortometrajes juntos –explica Juan Andrés.
Para él, los relatos se complementan, en tanto tienen una fuerza diferente. Ninguna es su favorita, porque tienen características individuales.
–La película comenzó con un proceso de investigación en los tres países. Dos años recolectando historias, observando las dinámicas en los barrios donde íbamos a grabar y escribiendo el guion, que tuvo varias versiones.
No fue fácil encontrar los actores y por eso el proceso de casting fue largo. Quería que fueran actores naturales, de los barrios donde rodaron. Hicieron pruebas hasta en las esquinas. Cuando encontraron a los personajes principales tu-
vieron cuatro semanas de preparación para sacarles la energía y enseñarles a comunicarse con los otros actores, con el mismo director y el equipo en general. Ahí sí empezó el rodaje. El trabajo duró dos años.
– Yo siento que el filme me enseñó a poder comunicar mi idea cinematográfica y su espíritu a gente diferente, pues teníamos un equipo distinto en cada país para grabar. Fue un reto y a la vez un privilegio contar con un equipo en México, Canadá y Colombia; cada uno tiene maneras diferentes de trabajar y fue muy enriquecedor aprender de ellos. Un ejercicio intenso