Que obras públicas no quiebren el comercio
Cuando la ejecución se atrasa, condenan a los comerciantes a sufrir pérdidas económicas. Fenalco pide alivios tributarios para todos los afectados.
LosL trabajos de infraestructurar que se retrasan suelen generarn efectos negativos en los negociosn locales, que pierden clientela y dinero; por lo que los comerciantes piden trato equitativo y compensaciones.
Amedida que van creciendo las ciudades, es necesario adaptar su infraestructura vial y de transporte para mantener y mejorar la calidad de vida de quienes las habitan. El ordenamiento territorial es clave en este sentido, pero cuando toca intervenir una zona o un tramo que ha crecido sin planeación, es cuando comienza el caos.
El comercio establecido en el lugar que se va a transformar es el nicho que más resulta afectado. Algunos tienen el músculo financiero para aguantar durante un tiempo la falta de clientes que se pierden por las incomodidades que les genera una obra pública, otros cierran mientras pasa la construcción, pero los más perjudicados, se van a bancarrota.
Por la manera en la que se expandieron Medellín y los demás municipios del Valle de Aburrá, esta situación siempre se va a presentar. El comercio agremiado lo sabe y no se opone al desarrollo que permite modernizar la ciudad y la región y que los beneficiará a futuro.
“Es un deber de todos colaborar para hacer que el Valle de Aburrá sea una región moderna, competitiva y productiva. Está claro que cualquier obra civil pública generará, durante su construcción, afectaciones a su zona de influencia en la movilidad vehicular y peatonal, tanto para el comercio como para los residentes; con eso nos toca hacer un esfuerzo y sacrificio en pro de mejorar nuestras condiciones urbanas”, insistió Sergio Ignacio Soto, director de la Federación Nacional de Comerciantes, Fenalco, capítulo Antioquia.
En este sentido, manifiesta el dirigente gremial, es clave —y de carácter obligatorio— la socialización previa de los cronogramas de las obras con comerciantes y residentes de la zona de influencia y, por supuesto, que estos se cumplan. Sin embargo, es el incumplimiento el que agrava la situación del gremio, algo que ya se ha vuelto común.
Proyectos que afectaron
“Hemos tenido casos muy complicados; por ejemplo, con la construcción del corredor de la calle 30 para Metroplús, el tiempo de los trabajos se triplicó y eso obligó el cierre de muchos establecimientos comerciales, con pérdidas millonarias. La demora en la entre- ga de la etapa 1A de Parques del Río también fue perjudicial, porque afectó la movilidad de una vía nacional, impactando la competitividad y productividad de la región”, expuso Soto.
Igualmente, sostiene el director de Fenalco, los trabajos de infraestructura vial ejecutados en El Poblado en el último quinquenio fueron muy perjudiciales para este renglón económico de la comuna 14 de Medellín.
“Las obras de valorización de El Poblado han sido un desastre para el comercio. Han sufrido incumplimientos severos y deficiencias técnicas, lo cual ha producido daño emergente y lucro cesante, lo que da el derecho de demandar por parte de los afectados; y con más razón si fueron pagadas a través de una contribución extraordinaria como lo fue en este caso”, afirmó Soto.
Alivios
Fenalco reiteró, a través de EL COLOMBIANO, que cuando se presenten atrasos en los cronogramas de obra, haya un trato justo y equitativo con los comerciantes.
“Para compensar, durante el desarrollo normal de la obra, la municipalidad puede reducir los impuestos al conglomerado comercial y empresarial de la zona de influencia. Pero, ya cuando se comprueba que se empezó a incumplir el cronograma y que habrá atrasos en la entrega, deberían exonerarlos del pago. No hay productividad, no hay ventas, se pierden empleos, pero les cobran impuestos como si nada estuviera pasando”, pidió Soto de manera enfática.
Además, solicita el gremio, que la banca privada también ayude con créditos a largo plazo con tasas de interés favorables.
Protección a moradores
En el Plan de Desarrollo de Medellín 2016-2019 se incluyó el proyecto “Protección a moradores y actividades económicas y productivas”, cuyo responsable es el Departamento Administrativo de Planeación.
Este es la ejecución del compromiso establecido en el Subsistema de Vulnerabilidad Social y Económica defi- nido en el nuevo Plan de Ordenamiento Territorial (POT) de la capital antioqueña, en el que el principio de protección a moradores y al comercio de productos y servicios, se transforma en una política pública como un instrumento de gobierno.
De esta forma la Alcaldía de Medellín los acompaña en los procesos de renovación urbana, mejoramiento integral y demás proyectos de infraestructura de gran impacto que se realizan en la ciudad.
“El almacén Consumo Poblado pasó de vender 28.400 millones de pesos en 2013, a 9.350 millones de pesos en 2016”. RESPUESTA OFICIAL Cooperativa Consumo
A continuación exponemos cuatro casos que evidencian cómo comercio y residentes se ven afectados por las obras de infraestructura vial y de transporte, sea por el desarrollo normal de estas o por atrasos e incumplimientos en el cronograma.