Reforma Política, con los ojos en la financiación
Modificaciones a la estructura del Consejo Nacional Electoral (CNE), un mayor control a la financiación de las campañas políticas y cambios en la creación de los partidos, son algunos de los temas que más llaman la atención de la Reforma Política, que empezaría su discusión el próximo miércoles en la Cámara y la cual fue radicada ayer por el Gobierno Nacional.
El ministro del Interior, Guillermo Rivera, aseguró que el nuevo CNE “tendrá las mismas funciones del actual, pero también competencias jurisdiccionales”, es decir, tendría poderes judiciales en determinados temas, asunto por el cuál es duramente cuestionado en la actualidad, pues, por ejemplo, en el caso de la financiación ilegal de campañas que se dio con el caso Odebrecht, no tiene dientes para actuar.
Rivera destacó medidas para controlar la financiación de campañas, como la prohibición de contratación de transporte, dádivas, donaciones y regalos. “Se obliga que particulares que contribuyan a la financiación lo declaren públicamente. De no hacerlo, se exponen a una sanción penal”.
La Procuraduría mantiene sus competencias de destituir a un servidor público de elección popular, pero en caso de inhabilitarlo, el Consejo de Estado tendrá un mes para definir si se trata de la muerte política.
Sobre el transfuguismo, reiteró que va en contra de la Reforma Política que “busca legitimar las instituciones de origen popular” y esa conducta le quita seriedad a la activi- dad política.
“La financiación de campañas será estatal y un menor porcentaje, particular”, afirmó. También propone que los congresistas no podrán permanecer más de tres periodos y quienes aspiren a cargos públicos, deberán acreditar, obligatoriamente, que votaron. En medio del fragor de las campañas electorales, la reforma promete cambios de fondo