Miguel Reyes, con la pinta del escarabajo
Este joven ciclista, de 25 años, es el nuevo rey de la montaña del país. Aspira ir a Europa.
Hace dos meses, Miguel Ángel Reyes no tenía equipo y su futuro en el ciclismo era poco alentador, pues a pesar de ajustar cinco años como ciclista profesional ninguna escuadra lo había tenido en cuenta para esta temporada. Sin embargo, una llamada telefónica le cambiaría el rumbo a su vida ciclística.
De 25 años e inquieto por encontrar donde entrenar y con quien competir, Reyes llamó a Alexánder Soler, con quien ya había corrido en otros equipos y le pidió el favor que le permitiera hacerlo a su lado.
Soler consciente de la calidad deportiva y humana de Miguel Ángel no dudo en darle el apoyo y con él inició una rutina intensa de preparación, cuyo principal objetivo era afrontar la Vuelta a Colombia vinculado a su nuevo equipo, respaldado por la Agencia Nacional de Seguridad Vial.
“Yo sabía que me tenía que esforzar al máximo pues solo me quedaba mes y medio para prepararme”, relata el ga- nador de la camiseta de la montaña, ganador de la cima más alta de la carrera (Letras, 3.692 metros y una pendiente media del 3’75%).
Desde el primer día en la Vuelta Miguel demostró que venía con la ambición de dar de qué hablar. En la cuarta etapa demostró que en la escalada Colombia tiene en él a uno de los mejores escarabajos nuevos del momento, pues batalló sin tregua hasta el final, aunque la victoria se le escapó.
“En El Picacho pensé que iba a ganar, finalmente la victoria fue para Juan Pablo Suárez, y me quedó clavada la espinita porque había hecho un buen trabajo y me sentía fuerte. Por eso en el alto de Letras quería la revancha, la luché y gracias a Dios se me dio el triunfo”.
Victoria que además le aseguró el premio de la montaña y por eso desde ayer y hasta el domingo será el portador de la camiseta a pepas verdes que lo acredita como el mejor en esa modalidad (39 puntos, superando a Suárez, 28 y a Miguel Ángel Rubiano, 23), ya inalcanzable.
Alexánder Soler, emocionado, ve como el tiempo le dio la razón al aceptarlo en el equipo. No se equivocó.
Miguel seguirá entrenando juicioso pues su meta es llegar al ciclismo de Europa, sabe que no es fácil, pero espera en la carretera seguir demostran- do que tiene condiciones para llegar lejos. En el 2015 ya tubo una experiencia en el equipo continental taiwanés RTS-Santic Racing Team, con el cual figuró en una vuelta en China.
Por el momento el corre- dor continuará entrenando y en su tiempo libre haciendo labores del campo, ese que tanto ama y disfruta, ya sea ordeñando las vacas o montando en los caballos de paso fino, su otra gran pasión