Muñoz, etiqueta de exportación
Tras ser subcampeón de la Vuelta de la Juventud su nombre empezó a ser tenido en cuenta por las distintas formaciones europeas. Actuó en el Giro sub-23; en el l’Avenir sigue escalando.
Cristian Camilo Muñoz, el joven que de niño sembraba cebolla y además le ayudaba a sus padres con la crianza de ganado en una pequeña parcela que tienen en Ventaquemada, Boyacá, está en la mira de grandes equipos del ciclismo mundial.
De hecho, antes de llegar al Tour de l’Avenir, la carrera francesa sub-23 más importante de este deporte, fue citado a Bélgica para hacer unas pruebas físicas con el conjunto Quick-Step, el cual cuenta con los corredores más potentes y veloces en la actualidad pero que también apunta a dejar huella con escaladores, como Muñoz, quien viene de ser el colombiano más destacado en el Giro de Italia juvenil -puesto 13-.
“Los equipos reconocidos quieren robarse el show en todos los terrenos, tanto en el plan como subiendo, y frente a esto tengo una buena oportunidad de estar allí, al lado de gente destacada, entre ellos Fernando Gaviria y Álvaro Hodeg (este último está a prueba)”, asegura el pedalista de escasos 21 años de edad, quien en los últimos dos años fue subcampeón de la Vuelta de la Juventud, la última de ellas por escasos dos segundos frente a Sergio Martínez, a la postre campeón.
Pese a terminar con un trago amargo en la garganta, sus esfuerzos empiezan a ser recompensados.
“Dicen que más allá de un triunfo, lo fundamental es seguir luchando para revalidar lo hecho. No me dejo vencer ante la derrota, al contrario, continúo trabajando fuerte porque en cualquier momento los sueños se cumplen”, manifiesta el corredor, quien pertenece al elenco Coldeportes-Zenú-Claro.
El test que realizó el corredor en la escuadra belga fue de potencia y resistencia.
4 segundos separan a dos colombianos del liderato: Álvaro Hodeg (4°) y Egan bernal (14°.) en la general.
“En este último me fue muy bien en cuanto a los vatios que moví, quedé contento y ellos también. Lo que sigue es esforzarse más para poder dar el salto al ciclismo europeo, en el que anhelo correr un Tour de Francia y dejar en alto el nombre de mi país y brindarle muchas satisfacciones a mi familia”, se ilusiona el hijo de Luis Antonio Muñoz y María del Carmen Lancheros, quienes desde el campo ven con orgullo los alcances de su hijo, quien se inició en el ciclomontañismo, modalidad que, cuando puede, practica.
Soñando despierto
Muñoz, ganador este año de la penúltima y última etapas de giro juvenil nacional, siente que está soñando despierto por todas las oportunidades que se le han presentado después de aquella competencia.
Actuar por primera vez en el Tour de l’Avenir, en el que han salido grandes íconos de esta disciplina, como Felice Gimondi, Greg LeMond, Miguel Induráin, Laurent Fignon, Nairo Quintana, entre otros, le da a entender que su proceso como deportista va por buen camino.
“Solo las personas que actúan en esta competencia saben el orgullo que se siente, es difícil explicarlo con palabras. Estoy cada día mejor, la idea es continuar trabajando en equipo, ayudando a Egan Bernal para que pueda lograr el título”, indica Muñoz, pedalista de 63 kilos de pesos y 1.88 metros de estatura.
Su regularidad y mentalidad fuerte lo proyectan para escalar alto. En las tres últimas etapas del Tour de l’Avenir, de alta montaña, será pieza clave para defender a su líder o para responder si este flaquea. Sabe que lo observan y hasta ahora aprovecha esta vitrina para mostrar sus cualidades