¿Y EL ÁREA METROPOLITANA?
Tenía razón el alcalde de Medellín Federico Gutiérrez al reclamarle resultados en el tema ambiental al Área Metropolita- na del Valle de Aburrá -AMVApues son parte fundamental de sus funciones, deberes e inversiones. Fue vehemente el alcalde diciendo que “No tiene nada que estar haciendo en temas de paz, para eso hay otras entidades; habitantes de calle, para eso son las autoridades locales”.
¿Quién duda de la importancia de los temas de paz, convivencia y salud? Pero es que el AMVA tiene unas obligaciones por ley con los recursos que recibe de los municipios que la conforman. Si bien la normatividad le establece unas funciones en cuanto a la coordinación territorial como son la movilidad, seguridad, vivienda de interés social y servicios públicos metropolitanos; los recursos que recibe el AMVA provienen de dos fuentes básicamente: la sobretasa ambiental y los aportes voluntarios de los municipios por pertenecer a ella. Por ley los primeros se deben dedicar a temas ambientales que tanto nos agobian a los que habitamos este contaminado valle. Para el 2017 son más de $186.000 millones por este concepto, el 65 % de sus ingresos corrientes. Los segundos se deben invertir en “hechos metropolitanos”, es decir, proyectos de impacto transversal.
Son recursos cuantiosos los que se tienen allí para temas ambientales, que en el cuatrienio se acercan a los $800 mil millones, de los cuales Medellín pone el 75,%. Esas inversiones deberían tener un impacto significativo, real, medible, cuantificable en el ambiente, pero ahí viene el enojo del alcalde porque deduce uno de su reclamo que no se están yendo para lo que es, ni se están logrando resultados importantes.
Las fuentes móviles son la principal causante de la contaminación ambiental en el Valle de Aburrá. Se dice que el tranvía de la 80, que es una de las soluciones estructurales al tema, costaría $ 2 billones. La Alcaldía tiene separados para este propósito $600 mil millones de la venta de Isagén y le falta el resto para emprenderlo. ¿Podría la AMVA contribuir a su cofinanciación? Pues pienso que sí, ya sea a través de los recursos de sobretasa o de los aportes voluntarios de los municipios, que ascenderían estos últimos en los cuatro años de gobierno a más de $320 mil millones, donde Medellín contribuye con más del 80 %.
La figura institucional de AMVA es importante. En este valle de municipios conurbados debe existir un espacio donde los problemas comunes sean solucionados con una mirada integral. Pero debemos ver los resultados ambientales de la inversión de esos recursos.
Por eso la intranquilidad del alcalde de Medellín al ver que por cualquier razón andan metidos cofinanciando e interviniendo en temas que no deberían. El presidente de su junta directiva es el alcalde de Medellín para que tome las decisiones que considere necesarias.
Finalmente, preocupa que el AMVA no aportó la información requerida para el análisis y elaboración del último informe de “Medellín cómo vamos”. Una de las grandes dificultades del sector ambiental es el control y seguimiento a los recursos que por ley se disponen para tal fin. Nuevamente, tenemos que ver las soluciones reales y medibles con todos esos recursos
Tenía razón el alcalde de Medellín al reclamarle resultados en el tema ambiental al Área Metropolitana.