EMILIANA, ¡prometedora!
La antioqueña jugará hoy las semifinales del US Open júnior, hito histórico en el país.
Desde las 7:30 a.m., después de un desayuno liviano, Emiliana Arango empieza a entrenar en las canchas de tenis de Brandenton, La Florida (Estados Unidos), donde actualmente reside.
Con intermedios para consumir fruta, ejercicios de gimnasio y el almuerzo, su estadía en el escenario es hasta las tres de la tarde. Después, hasta las 7:00 p.m., se va a realizar sus estudios de bachillerato.
Para Ramón Arango, su padre, esta rutina es la muestra de la disciplina y la determinación con la que se ha criado su hija que hoy (al medio día de Colombia) se juega el partido más importante de su joven carrera: la semifinal del US Open júnior ante la estadounidense Amanda Anisimova.
“Son un montón de factores los que hoy la tienen en esta instancia, pero debo resaltar su perseverancia, ella jamás se rinde”, explica el orgulloso papá, quien dice que, desde los 4 años, su hija se sintió atraída por la raqueta.
A los 16 años, Emiliana escribe una de las grandes proezas del tenis colombiano en la categoría juvenil. Luego de derrotar ayer a Elysia Bolton (7-6 y 6-2) en los cuartos de final, se convirtió en la primera dama del país en llegar tan lejos en el Grand Slam estadounidense, emulando lo hecho por Santiago Giraldo en el 2005, en esa categoría.
Ramón, que tiene una controlada comunicación con la deportista para no distraerla, dice que se encuentra en un estado de forma espectacular y que se siente muy comprometida por marcar historia.
“Ella siempre ha querido ser la número uno. Una cosa curiosa es que le conviene más empezar perdiendo porque, inmediatamente, levanta el nivel”, relata.
Más allá del resultado de hoy ante la cuarta preclasificada, lo que marca la actuación de Emiliana sirve para ilusionarse con un relevo generacional y la aparición de un modelo como Fabiola Zuluaga o Catalina Castaño. “Yo, en 10 años, la veo siendo una de las top mundiales”, finaliza el papá