EN BELÉN, CAMILA PRACTICA EL DEPORTE QUE LA ENAMORA
Tres años en Escuelas Populares le han servido a Camila Arismendy para formarse como deportista y persona. “Son una oportunidad grande para que jóvenes y niños estemos en un ambiente sano, que podamos desarrollar relaciones interpersonales adecuadas, que ocupemos nuestros espacios en cosas productivas y no estemos tentadas por los vicios”. Para ella, martes, jueves, sábado y domingo son sagrados para visitar la unidad deportiva de Belén. Allí, durante tres años, no ha parado de correr en la cancha de baloncesto. “Gracias a la televisión me enamoré de esta disciplina. Siempre me pareció interesante porque, a pesar de ser un deporte de contacto, no es brusco”. Como no tenía plata para inscribirse en un club, las Escuelas Populares aparecieron como una gran alternativa. Se acercó a ellas aprovechando que varios amigos ya estaban inscritos. “Fue una gran decisión porque me siento plena jugando y compartiendo con ellos”. A sus 16 años complementa el deporte de la cesta haciendo pesas y yendo al gimnasio. A la actividad física le agrega el estudio pues adelanta el grado once en la Inmaculada de Belén. Su anhelo, después de terminar bachillerato, es estudiar Contaduría, profesión de la cual espera vivir. “El deporte me da las bases para ser una persona disciplinada, y eso es lo que me servirá en el futuro cuando esté ejerciendo mi carrera, que es mi gran prioridad”. No descarta ser una gran deportista e incluso llegar a ser parte de una Selección para representar a Medellín. Pese a sus 1.67 metros de estatura, cifra que no es ideal para el baloncesto que requiere de gente alta, compensa, como asegura, “con las ganas y entrega que pongo en la cancha”.