El Colombiano

LA OTRA AMENAZA NORCOREANA

- Por THEO EMERY redaccion@elcolombia­no.com.co

La guerra verbal entre el presidente Trump y el líder norcoreano Kim Jong-un sobre el programa nuclear de Pyongyang ha sacudido nervios por todo el mundo. Pero el enjuiciami­ento de dos mujeres por utilizar el agente nervioso VX para asesinar al hermano medio de Kim nos re- cuerda que el arsenal letal de Corea del Norte no está limitado a armas nucleares. Las armas químicas del Norte posan un grave riesgo para Corea del Sur y la estabilida­d regional.

Expertos dicen que las municiones químicas por mucho tiempo han sido desplegada­s por la zona desmilitar­izada que separa al Norte y al Sur. En caso de un ataque militar contra el Norte, dicen los analistas, el régimen ve a los químicos como una opción para una respuesta primera. Seúl y sus 10 millones de habitantes podrían ser golpeados inmediatam­ente.

Los cálculos del número de víctimas son asombrosos. Las imágenes de Siria de niños gaseados con sarín en los últimos años han horrorizad­o al mundo; imagine una cifra de muertos en Corea del Sur mil veces mayor.

En un artículo en el Boletín de Científico­s Atómicos, el historiado­r militar Reid Kirby usó el término “mar de sarín” para describir tal ataque. Teniendo en cuenta la toxicidad del sarín, el tipo de artillería a lo largo de la zona desmilitar­i- zada, y la vulnerabil­idad de niños y ancianos, él estimó que un ataque con sarín podría matar hasta a 2,5 millones de personas en Seúl y dejar heridas a millones más.

Nadie por fuera del gobierno de Corea del Norte sabe con certeza la composició­n de las reservas químicas del país, pero inteligenc­ia de desertores y el gobierno de Corea del Sur sugieren que Pyongyang tiene entre 2.500 y 5.000 toneladas métricas de unos 20 agentes de guerra químicos.

Expertos por mucho tiempo han sospechado que el arsenal del Norte incluye al VX, que es mucho más tóxico que el sarín. El espantoso asesinato en febrero del medio hermano de Kim, Kim

Jong-nam, un descarado asesinato en un aeropuerto de Malasia que según fiscales fue realizado por dos mujeres, entrenadas por agentes norcoreano­s, que frotaron la cara de la víctima con VX, ha disipado cualquier duda de que el Norte tiene el químico.

El asesinato de Kim Jongnam también da origen al espectro de nueva proliferac­ión de armas químicas. El hecho de que el VX salió de Corea del Norte hacia otro país sin ser detectado podría indicar que Kim usaría las extensas redes de traficante­s criminales del Norte para secretamen­te ayudar a otras naciones, o actores no estatales, para obtenerlo o producirlo.

La amenaza química de Corea del Norte recuerda un momento en que las armas químicas representa­ban una amenaza global mucho mayor que la actual. La doctrina de la disuasión estratégic­a -mantener reservas de poderosas armas para mantener a raya a un adversario con armas similares- no comenzó con ar- mas nucleares; más bien, surgió de la guerra de gas en la Primera Guerra Mundial.

Después de la guerra, el Protocolo de Ginebra de 1925 prohibió la guerra química pero no las armas químicas. La lógica de esa aparente contradicc­ión era que las naciones deshonesta­s podían ignorar el derecho internacio­nal y usar armas químicas para atacar ciudades y poblacione­s civiles de la misma manera en que Corea del Norte amenaza con hacerlo hoy. La manera de disuadir tales ataques, según la lógica, era mantener un arsenal. Si las naciones signataria­s sufrieran un ataque químico, podrían tomar represalia­s similares.

El Senado de Estados Unidos, convencido de que el acuerdo era tontería en un mundo peligroso, se negó a ratificar el pacto.

Muchos expertos dicen que Kim, si es atacado con armas convencion­ales como advertenci­a o ataque preventivo, podría ver a las armas químicas como una forma de tomar represalia­s sin escalar a armas nucleares

Las armas químicas de Corea del Norte posan un grave riesgo para Corea del Sur y la estabilida­d regional.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia