“DIM, hora de replantear”: Mao
El ídolo rojo es partidario del regreso de Zubeldía. Invita a planificar mejor las decisiones.
Aún con la tristeza que le dejó la eliminación del Medellín en la Liga Águila-2, Mauricio Molina empezó ayer a experimentar una nueva vida, luego de 20 años dedicados al fútbol como jugador.
Por la mañana se fue con su familia a la cliclovía, una actividad que por sus compromisos profesionales casi nunca podía hacer. “Aquí, en mi primer día de jubilado”, dijo jocosamente el ídolo de los escarlatas, que en diálogo con EL COLOMBIANO también dio luces para que el club reencuentre el camino.
¿Creía que se podía prolongar la temporada?
“Nunca perdí la esperanza, como sucedió en la final de Copa contra Junior, a pesar de que se sabía que estaba en mejor momento, con más confianza, regulado, y nosotros veníamos de abajo, de tropiezo en tropiezo, pasando por penaltis. Lo mismo pasó en Liga, veníamos con una bola de nieve muy grande y era complicado voltear la situación. Pero estuvimos vivos hasta la última fecha, dependíamos de nosotros”.
Aunque la eliminación no fue en el clásico...
“Es claro que la clasificación se perdió desde el inicio del torneo. Especialmente porque cedimos muchos puntos en casa. Empatamos con Millos, Huila, y perdimos con Santa Fe y Rionegro... El rendimiento fue muy bajo para lo que se tenía. Con dos punticos más en el Atanasio era suficiente”.
¿Qué pasó en la expulsión del sábado?
“Lo único que le pedimos al juez fue una explicación, pues el cuarto árbitro había mostrado tres minutos más y él solo dio uno. Dijo que su compañero se había equivocado”.
¿Cómo enderezar el camino del DIM?
“Entre todo lo malo que pasó, yo le veo el lado positivo porque el equipo tenía que sentir que las cosas no se dan cuando no se hacen bien. Es una oportunidad para replantear muchos aspectos. Se venía haciendo un buen trabajo desde años atrás, el título en 2016 y estábamos en casi todas las finales. Ahora se debe planificar, estudiar e investigar más las decisiones. Las personas que hay son buenas y le han aportado demasiado a la institución. Permitieron el inicio de la transformación y pusieron las bases para un proyecto que en pocos años dará resultados. Ya hay estructura, tenemos sede... Es gente buena, lo que pasa es que se han cometido errores de los que seguro se aprenderá”.
¿Ud. cambiaría la nómina?
“Hay material humano bueno, claro que cuando los objetivos no se consiguen hay que evaluar y entre eso estamos los jugadores, los principales responsables de lo sucedido. Uno, con el rendimiento, es el que se gana el derecho de continuar o no. De las cosas que más triste me deja es haber quedado por fuera de cuartos de final con una nómina que es para estar peleando los primeros lugares”.
¿Y el cuerpo técnico?
“Los hermanos Rescalvo (Ismael y Juan) están cumpliendo una labor distinta en el club, que hacía falta: desarro- llar un proyecto desde las inferiores hasta el plantel profesional. Creo que seguirán ahí y tienen los pergaminos para hacerlo. La llegada de Iván Corredor a las categorías menores, que habían perdido identidad, también es positivo. Ahora los directivos tendrán que buscar un nuevo entrenador. Creo que cuando trajeron a Luis Zubeldía se hizo de una manera planificada, y este venía aportado mucho hasta que recibió la oferta de España”.
¿Le gustaría que volviera?
“Sí, a mí sí. Los jugadores estábamos muy satisfechos con su trabajo, era un buen proyecto para el club. El equipo jugaba bien y sacaba puntos, pero lastimosamente un partido desastroso en Cali (4-1) nos privó de llegar a la semifinal”