Cabo Manglares, ahora un paraíso protegido
Colombia ya cuenta con 28.918.584 hectáreas de áreas protegidas. El reto es que llegue el desarrollo a regiones apartadas.
Fue declarado Distrito Nacional de Manejo Integrado en el Pacífico, hecho que lleva al cuidado del mangle, las tor- tugas y el control a la pesca. ¿A qué aspiran las comunidades que lo operarán?
“Aquí nos falta todo y queremos cambiar nuestra forma de vida. Tener un médico todos los días, por ejemplo”. LUIS ÁNGEL BUSTOS Líder de Cabo Manglares.
CEn Candelilla de la Mar llueven mangos. De repente vas caminando por el barro y tasss, cae uno. Otras veces los niños se suben a los árboles y mecen las ramas. Es rutina. En este poblado de 80 casitas de tabla, compran el agua potable en Ecuador porque, aunque están rodeados del cinturón de manglares más grande de Nariño – uno de los más grande de Colombia– no tienen acueducto y tampoco alcantarillado, entonces la compran o esperan que llueva. En Candelilla de la Mar suena un currulao y hasta los militares bailan.
Y suena la marimba porque están de fiesta. Esta vereda, enclavada en el Pacifico, a dos horas en lancha desde Tumaco, está en el corazón de la nueva área protegida que este fin de semana declaró el Ministerio de Ambiente: el Distrito Nacional de Manejo Inte- grado Cabo Manglares Bajo Mira y Frontera. La zona a proteger suma 190.282 hectáreas.
Esto significa que se protegerán los manglares, las playas de anidación de tortugas, se controlará la pesca y se realizará un plan de manejo para hacer un uso sostenible de la biodiversidad, básicamente, por parte de las comunidades. En compensación, esperan que el Estado se acuerde de sus eternas necesidades y les lleven energía, agua, salud, educación y un muelle.
Luis Ángel Bustos, líder de la región, manifestó que lucharon para conseguir esta declaratoria y por esa razón esperan, por lo menos, que el país sepa que existen. “Nosotros sí creemos que la vida nos puede cambiar, porque vamos a manejar conjuntamente el área protegida y eso para nosotros es muy bueno, porque nos pueden traer agua potable, salud y educación. Lo que tenemos son necesidades, aquí nos falta todo y queremos cambiar nuestra forma de vida. Tener un médico todos los días, por ejemplo”, dijo.
Entretanto, Oberman Torres, representante legal del Consejo Comunitario, aseguró que a buena hora se hizo esta declaratoria ya que en la zona hay bastantes desafíos entre los que se cuentan cultivos ilícitos, deforestación y vertimientos indiscriminados en los ríos.
“Hay que controlar la pesca principalmente de foráneos. Debido a los malos usos que se le ha dado al tema, se ha
visto una reducción en la producción. Hoy en día se habla de una disminución para pesca artesanal que supera el 70 %. Sabemos que nuestros ecosistemas son benditos y si empezamos desde hoy a realizar un manejo, se va a recuperar”, dijo y agregó es muy importante porque en la zona hay 1.108 familias de pescadores.
Por último, el ministro de Ambiente, Luis Gilberto Murillo, quien visitó la zona, destacó que esta área posee importantes elementos de biodiversidad asociados a sitios de alimentación y descanso de aves, zonas de concentración de recursos pesqueros, bosques inundables de manglar, playas de baja energía donde anidan tortugas y bancos de piangua. Subrayó que los usos y actividades permitidas para esta área serán definidos conjuntamente entre el Consejo Comunitario y Parques Nacionales de Colombia, basados en un marco de sostenibilidad, basado en las costumbres y tradiciones de las comunidades
Tras su visita, el ministro Murillo anunció que como primera medida se construirá un muelle por parte de la Armada Nacional, ya que hoy, cuando la marea baja hay que caminar, para poder llegar a la costa, a lo largo de 50 metros entre lodo y basura. En Candelilla de la Mar saben la hora del día dependiendo de la marea y porque se ensucian las botas, esto también es rutina