2. ¿CÓMO VUELAN LOS EQUIPOS?
Los clubes del fútbol colombiano prefieren vuelos comerciales para sus desplazamientos dentro y fuera del país, una política que eventualmente cambia cuando se trata de una final, aunque las precauciones aumentaron para buscar empresas particulares, tras el accidente del año pasado. Víctor Marulanda, gerente deportivo de Atlético Nacional, dice que cuando se contrata un avión privado buscan ganar tiempo de descanso para los jugadores, comodidad y evitar conexiones. El año pasado, el club lo hizo 4 veces: 3 internacionales a Bolivia, Ecuador y Paraguay (incluso en la misma nave estrellada con Chapecoense), y una local, en la final de la Copa Colombia con Junior. Este año no realizó ninguno. Sin embargo, esto implica una mayor inversión económica, pues un chárter a Brasil cuesta cerca de 450 millones de pesos, mientras que la otra opción valdría 160 millones de pesos, aproximadamente. Independiente Medellín, Junior y Santa Fe, que este año tuvieron competencias en el exterior, no acudieron a los chárter. Como dice Pablo García, jefe de Comunicaciones del equipo cardenal, habitualmente contratan empresas de logística para organizar hospedaje y viajes, “procurando las mejores condiciones para los deportistas”, pero siempre exigen “aerolíneas conocidas y con todos los protocolos de seguridad”. Por reglamento de la Confederación Suramericana de Fútbol (Conmebol), los equipos visitantes deben estar 24 horas antes en la sede del encuentro, excepto fuerza mayor, de ahí que muchos clubes y seleccionados opten por chárter. Nunca, y así lo ha manifestado siempre, esta entidad recomienda aerolíneas. La decisión de la forma de viajar es exclusiva de cada equipo.