INADMISIBLE AGRESIÓN CONTRA REPORTERO GRÁFICO POR PARTE DE AGENTES DE LA POLICÍA METROPOLITANA

Ayer, durante la cobertura periodística de un hecho de indudable interés público, el reportero gráfico Robinson Sáenz, empleado de la Casa Editorial EL COLOMBIANO y al servicio profesional del periódico Q’Hubo (edición Medellín), sufrió una inadmisible agresión física y verbal por parte de agentes activos de la Policía Na- cional, vestidos con uniforme y portadores de sus armas de dotación, quienes se molestaron porque el fotógrafo, con autorización del juez, hacía registro gráfico de la audiencia pública en la sede del Palacio de Justicia en la cual se definía la situación jurídica de unos agentes de la Policía Metropolitana capturados por asociación con la banda La Terraza. Los agentes, uniformados, estaban en la sala animando a los capturados, y uno de ellos empujó al fotógrafo, amenazándolo al decirle de forma agresiva “cuídese, que no está tratando con los niños del barrio”, añadiendo epítetos como “sapo”, “payaso” o “pirobo”. El agente que amenazó está identificado ante la Policía Metropolitana. También se denunciará este hecho ante la Fiscalía.

Es un grave atropello a la libertad de prensa y al derecho ciudadano a la información veraz e imparcial. Es, ante todo, una coacción ilegítima, ilegal, contra un ciudadano, que entraña graves riesgos a su integridad personal. La- mentablemente hay antecedentes. El primero de mayo de 2013, otro periodista gráfico de EL COLOMBIANO, Jorge Esteban Vanegas, sufrió la agresión de un agente de la misma Meval mientras cubría unas manifestaciones. Demandamos de las autoridades tomar acciones correctivas y sancionatorias de forma inmediata