AL PAISA LE GUSTA TOMARSE SU CAFÉ SENTADO
Llegar a la región del café no es fácil, más si la marca crece en Bogotá. Tostao’ es la marca que ha revolucionado el mercado del café su apuesta por Medellín llegó a tal punto que en el primer año tuvo 12 locales: “Las ventas de las primeras tiendas en la capital antioqueña fueron muy superiores a cuando abrimos las primeras en Bogotá. Esto es un buen síntoma en términos de percepción y recibimiento de la marca”, afirmó Pedro Gasca, orientador general de BBI Colombia. El modelo, ya completa 230 puntos de venta y para 2018 espera crecer esta cifra a 240, aunque la meta es completar 700 a 2020. Si bien, Gasca reconoce que Tostao’ no quiere estrechar su marca en etiquetas “no tiene estratos, ni filtros, ni un nicho específico de consumo”, sí halló una particularidad en el mercado paisa: “hemos identificado en el consumidor paisa que le gusta tomarse su café sentado”. El orientador reconoce que el objetivo nació como una idea de negocio para llevar, en donde cualquier producto se pueda disfrutar mientras se camina hacia la parada del transporte público o en la oficina, pero “en Medellín ha sido importante contemplar que por pequeña que sea la tienda, tengamos una barra y un par de sillas para tomarse un buen café sin prisa y sin pausa”. Gasca entiende que su modelo es disruptivo y pertinente en un momento en que la economía no pasa por un buen momento. “En un país como Colombia, donde alrededor del 80% de la población está catalogada, por el sitio donde vive, como estrato 1, 2 y 3; los servicios y productos de la categoría se estaban enfocando a un público minoritario. En Tostao’ no fijamos los precios pensando en lo que hay en el mercado, sino en ser rentables, con precios justos, dando bienestar a los consumidores con productos de excelente calidad”, afirmó el directivo. Las miradas, puestas en su alto crecimiento sin un modelo de franquicias han llevado a Tostao’ a confirmar que su crecimiento se debe al interés y legitimación de sus consumidores, según analiza el ejecutivo; pero también de la seducción que ha supuesto el modelo para inversionistas por el impacto en el mercado. “Y es debido a esta respuesta de consumo, que en ocasiones abrimos una tienda a pocas cuadras de la otra, con el fin de mejorar el servicio, atendiendo las necesidades y demanda de quienes nos visitan”, sostuvo Gasca. Esta apuesta tiene un portafolio de más de 140 productos que van desde un tinto de 700 pesos, hasta ensaladas y sándwiches, de las que el precio más alto lo tiene el wrap de $5.000 (a excepción de la libra de café calidad exportación). Los retos para ellos también están en el impoconsumo, pero sustentan su crecimiento en su poder de negociación.