PROMUEVE EL BUEN TRATO EN ESTA NAVIDAD
En el contexto social y cultural colombiano, el maltrato y abuso infantil y juvenil, son prácticas muy comunes y arraigadas –sustentadas en muchos casos-, como modos de formación, corrección y control, que trasciende la herencia cultural y social, con serias implicaciones físicas y sicológicas (baja autoestima, daño emocional, introversión, como las más representativas), derivadas del abuso físico, sexual, maltrato verbal, falta de atención (salud, nutrición, recreación), trabajo infantil, abandono y pedofilia. En muchos casos, estas prácticas no son consideradas como una forma de maltrato o abuso dentro del hogar o en ambientes educativos o en determinados niveles socioeconómicos; la creencia de violencia intrafamiliar, exclusiva en ambientes de pobreza y analfabetismo, está ratificada y reconoce este problema en contextos diferentes a la de la población vulnerable (pobreza, conflicto armado, desplazamiento forzado, entre otros) porque está siendo visibilizada como un problema familiar, que está afectando la dinámica –no solo intrafamiliar, sino las relaciones e interacciones de los menores de edad con su entorno social y cultural. Destaca el hecho que la vulneración de los derechos de los niños, niñas y adolescentes se manifieste y denuncie en los medios de comunicación social, en una actitud comprometida hacia el reconocimiento de un problema social y de salud pública que merece la atención institucio- nal y ciudadana, que posibilite la implementación y consolidación de los derechos de infantes y adolescentes, en un ejercicio reflexivo acerca del modo en que se está formando y educando y las implicaciones. La Iglesia Arquidiocesana de Medellín no está ajena a esta situación deprimente del ser humano, y presenta en esta Navidad el Pacto del Buen Trato como una respuesta a esta cruenta realidad.
Ya san Juan Pablo II nos decía: “En la familia, comunidad de personas, debe reservarse una atención especialísima al niño, desarrollando una profunda estima por su dignidad personal, así como un gran respeto y un generoso servicio a sus derechos”.
Igualmente, el papa Francisco, ha reiterado el rechazo a los casos de abuso a menores de edad, condena todo tipo de abusos contra los menores y afirmó que se debe castigar severamente a los abusadores. “¡Esta es una tragedia! ¡No debemos tolerar los abusos contra los menores de edad! ¡Debemos defender a los menores y castigar severamente a los abusadores!”.
El Programa Buen Trato a Niñas, Niños y Adolescentes en la Arquidiócesis de Medellín pretende consolidar el especial interés del Papa Francisco sobre la familia en su realidad social y espiritual y su llamado pastoral para acompañarlas desde sus diversas realidades, ratificando la importancia de la familia como principal célula de formación dentro de la sociedad