En el Aburrá, servicio de lujo en taxis
Conducirán vehículos de alta gama, de color negro, que solo se podrán solicitar con aplicación de celulares y serán de pago electrónico.
85 taxistas de Medellín se formaron en competencias para prestarlo. Conozca cómo serán los vehículos que recorrerán las vías de la región.
Prestar un servicio de transporte de lujo, con las herramientas idóneas pensando en la seguridad y comodidad del pasajero, será la tarea de 85 taxistas de Medellín luego de culminar un proceso formativo.
Esta formación, liderada por el Servicio Nacional de Aprendizaje, Sena, tuvo una duración de cuatro meses y tiene como objetivo mejorar las condiciones del servicio prestado por los taxistas, tanto con un vehículo seguro como con el buen trato hacia el usuario.
¿Cómo funcionará?
Para prestar un servicio de transporte de lujo, la normatividad del Ministerio de Transporte impone dos requisitos principales: contar con una aplicación digital y que los conductores estén debidamente certificados.
Para el caso de Medellín, esta sería la primera línea de taxi de lujo de la ciudad. La diferencia principal serán los vehículos, los cuales serán de color negro y contarán con geolocalización y aire acondicionado, y no se pueden tomar en la calle.
Marcela Escobar, de Coopebombas, entidad de la que hacen parte los taxistas capacitados, explicó que quien desee acceder a este servicio, lo podrá hacer desde cualquier punto de la ciudad a través de la aplicación y el pago será de manera electrónica.
“Ese, según la normatividad, será el único medio para usar este transporte. Los taxistas estarán en zonas estratégicas como hoteles y zonas comerciales, lo que facilitará su disponibilidad”, agregó.
Los nuevos vehículos de alta gama reemplazarían a viejos taxis que están circulando actualmente, para así no aumentar el parque automotor.
La capacitación se centró en formar en competencias para la atención al cliente, normas de seguridad y alistamiento del vehículo.
Durante el proceso de formación, los conductores primero repasaban conocimientos básicos (normas de tránsito y conducción) y luego, mediante la simulación de casos reales, en compañía de los tutores del Sena, ponían a prueba sus habilidades y el servicio prestado.
Orlando Suárez, taxista hace más de 19 años y uno de los graduados, comentó que con este proceso aprendieron “sobre cómo alistar el vehículo, pensando en la seguridad y comodidad del usuario. Además recodamos y socializamos las diferentes normas ”.
Orlando Suárez reiteró que esta formación es una manera de decirle al público y a los taxistas en general, que sí se puede laborar y prestar un servicio con las mejores condiciones y desde la legalidad