CONTRAPORTADA
El arquero argentino fue despedido con honores por los hinchas verdolagas en el Atanasio. Se irá al River Plate y deja un legado.
“Me hicieron sentir como en casa, gracias infinitas”: Armani
“Franco es un arquero con historia, un superarquero. Compartí con él cuatro años me dejó grandes enseñanzas”. DANIEL BOCANEGRA Lateral de Nacional
Llegó a la cancha llorando y así se fue, en medio de la ovación de cerca de 30 hinchas que ayer llegaron al estadio Atanasio Girardot a despedirlo, a reconocerle su aporte y comprometerlo para que, algún día, termine su carrera en Atlético Nacional.
Las manifestaciones de cariño de la fanaticada verdolaga logró quebrar la humanidad del hombre rubio y espigado, que esta vez encontró consuelo en los brazos de su esposa Daniela y de René Hi
guita, quienes lo acompañaron en su adiós.
Si los últimos días habían sido tristes para el arquero argentino Franco Armani, como el jueves cuando se despidió de su compañeros en Guarne, el de este vienes tocó sus entrañas al ingresar al predio en que se batió en los últimos siete años y verlo decorado con los trofeos que logró con el club y un público con los brazos tendidos para expresarle admiración.
“Por la tripe atajada, por los 13 títulos y la Libertadores en tus manos... Hasta pronto leyenda”, decía en un trapo de Sur, mensaje que se completaba con los cánticos que una y otra vez le entonaron al guardameta que irá al River Plate.
“Que lo sepa todo el mundo, se lo vamos a contar, Franco Armani es el más grande, de la historia en Nacional”.
Los elogios abundaron y hasta hubo tiempo para pedirle perdón, como lo hizo con gallardía Felipe Muñoz, quien tomó la vocería de Los del Sur al hacer referencia a las duras críticas que le hicieron en sus inicios, cuando era un desconocido.
Higuita resaltó la calidad humana de Armani, la pasión por lo que hace y el compromiso en su labor: “comprobé que tienes metido el escudo verdolaga en el corazón. En Nacional te hiciste, de Nacional eres y de aquí siempre serás”.
Entre aplausos de niños, jóvenes y adultos, el homenajeado tomó el micrófono, agradeció por hacerlo sentir como en casa, como un colombiano más. “Es un momento de mucha tristeza, pero tengo un sueño que quiero cumplir y lo voy a conseguir (llegar a la Selección de Argentina). Gracias por entenderme y me compro- meto que mi final de mi carrera deportiva será aquí en Nacional. Esto que está pasando solo se vive acá, nunca olvidaré tantas alegrías, infinitas gracias.... Volveré”.
Tras dar la vuelta “olímpica” y al son de los estribillos, el ídolo abandonó el escenario. “Franco, Franco Armani, esta hinchada jamás te olvidará”