Sea selectivo con su estudio
Si se quiere complementar, actualizar, perfeccionar, renovar o profundizar un conocimiento específico o una determinada habilidad, y no se dispone de mucho tiempo y dinero, una buena alternativa es hacer un diplomado, los cuales son cursos rápidos, flexibles y con una duración menor a 160 horas.
Sin embargo, como los diplomados hacen parte de la mal llamada educación informal, no están avalados ni controlados por el Ministerio ni por las Secretarías de Educación, de tal manera, que cualquier institución los puede ofrecer y dictar sin requisitos, lo cual puede incidir, negativamente, en su calidad. Además, el certificado que brinda es de asistencia, no otorga título o reconocimiento académico.
Elizabeth Bernal, coordinadora académica de la Asociación Colombiana de Universidades ( Ascun) precisó que “una empresa puede o no reconocer el estudio de un diplomado, sin embargo, no es de utilidad acercarse a este por interés general sino que se debe tener una mirada estratégica antes de inscribirse en él, una visión de lo que se va a hacer que permita que el diplomado confiera un rédito significativo”.
Fuentes del Observatorio de Educación Superior de Medellín (Odes) afirmaron que “aunque el certificado de asistencia a un diplomado no equivale a un título de educación formal, si permite obtener habilidades extras o perfeccio- narlas, lo cual puede elevar las posibilidades de lograr mejores oportunidades laborales”.
Y Luis Fernando Rendón, director de Educación Continua de la Eafit, aseveró que “actualmente, algunas instituciones de educación se han ocupado de crear pruebas, exámenes y trabajos para certificar si se aprueba o no, el programa y eso da un valor agregado, sin embargo, es más importante el desempeño de la persona en su vida laboral que el mismo diploma”.
¿Qué tener en cuenta?
En el momento de elegir un diplomado debe considerar varios aspectos para que su inversión esté bien encaminada.
Primero: investigue toda la oferta de su interés que haya en el mercado para que compare costos y beneficios.
Segundo: la institución que imparta el diplomado debe ser reconocida, tener trayectoria, buena imagen, estar certificada por el Ministerio de Educación o por la Secretaría de Educación, y mucho mejor, estar acreditada su calidad por el Centro Nacional de Acreditación.
Tercero: conocer el contenido del curso, la duración, la intensidad horaria, la metodología, qué profesores lo dictarán y la promesa de valor ( presentación de los beneficios que implica adquirir un producto o servicio) que hace la institución