PAGO DE PEAJES PARA MOTOCICLETAS, ¿QUIÉN DECIDIRÁ?
Durante el segundo foro con candidatos de Antioquia al Congreso, realizado en EL COLOMBIANO el pasado 23 de febrero, se les preguntó a los delegados de seis partidos políticos si apoyarían una medida legislativa para que los motociclistas pagaran peaje. Los seis candidatos contestaron de inmediato que no.
Es, ciertamente, una medida impopular. Ningún político en campaña va a decir que apoya el pago de peaje de las motos, igual que siempre prometen no aprobar subidas de impuestos, así luego validen las propuestas por los gobiernos. Pero que sea impopular no quiere decir que sea inconveniente, o que no se funde en razones objetivamente válidas.
Tarde o temprano habrá que fijar el pago de peajes para los motociclistas. Son usuarios de las vías –y en qué cantidad– y las cifras de accidentalidad son desproporcionadamente altas. Esta misma semana, el gobernador de Antioquia, Luis Pérez, insistió de nuevo en esta medida. Que se sepa, es el único político que lo plantea de forma pública y explicando las razones.
Si el nuevo Congreso, sea con apoyo o no del Gobierno que tome posesión el 7 de agosto, decide abordar el asunto, se encontrará obviamente con la protesta airada del numeroso colectivo de motoci- clistas del país, que por sí solo constituye una fuerza considerable. No obstante, lo primero que hay que explicar es que el pago de peajes no es una medida sancionatoria, no busca punibilidad sino igualdad, en el sentido de que no hay razón para que unos usuarios de las vías paguen por el servicio y otros estén eximidos