Los civiles, atrapados en Catatumbo
La semana pasada se reactivaron los combates entre el Eln y el Epl en esta zona de Norte de Santander. Se habla ya de 20 muertos en las hostilidades.
La ONU reportó la vulnerabilidad de cerca de 17 mil personas, en 7 municipios de la subregión, por la guerra entre el Eln y el Epl. La Policía dijo que aumentó los operativos.
En el Catatumbo, hoy es imposible saber si se corre más peligro quedándose en los pueblos o huyendo a otro lugar. Son cerca de 17 mil personas que viven en los municipios de San Calixto, El Tarra, Teorama, Convención, Hacarí, El Carmen y Tibú, en Norte de Santander, que se encuentran atrapados en medio del fuego entre el Eln y el Epl.
La voz de alerta la dio la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, Ocha, que especifica que hay 5.000 personas que no han podido salir de sus municipios por los combates que se vienen produciendo desde la semana pasada, por lo que advierten de “un riesgo de protección en la población civil y se prevé el registro de emergencias humanitarias”.
EL COLOMBIANO se comunicó con líderes de la región del Catatumbo. Algunos, claramente asustados, prefirieron no hablar por vía telefónica. Otros sí relatan la grave situación humanitaria que está teniendo lugar allí, con la salvedad de que se reserve su identidad, por los riesgos de seguridad que afrontan.
“Es que la situación aquí está tensa. Muy, pero muy tensa”, se excusó uno de ellos.
En busca de refugios
Relatan que los campesinos han buscado refugio en los cascos urbanos de Convención, Hacarí y Teorama, aunque allí no existan albergues temporales donde puedan ubicarse mientras baja el peligro. “Estamos ya en el tamaño de una crisis humanitaria. Necesitamos que se generen vías de ayuda a la gente”.
En Teorama, la ONU reporta dos civiles heridos por el enfrentamiento cruzado.
Agrega otro líder que además de los poblados priorizados por el ente internacional, también en Sardinata el enfrentamiento entre ambos grupos armados ilegales está golpeando a la población.
Justamente en esta población se alertó de una evacuación de aproximadamente 152 estudiantes de un colegio rural por parte de un actor armado; situación que, de mantenerse por más de una semana, podría convertirse en “confi- namiento” para esa población.
“Hay un desplazamiento masivo en toda la región”.
En esto coincide el reporte que da la ONU, que alerta que se ha presentado retención temporal de civiles incluyendo personal de misión médica, como se reporta que está ocurriendo en Conven- ción; además de desplazamientos, civiles heridos, cierre de comercio y restricciones de acceso a la educación de al menos 11.836 estudiantes y 553 docentes. “La actual situación humanitaria evidencia necesidades en protección, educación en emergencias y salud”, especifican.
No hay vías bloqueadas
Anticipando que este martes se dará un balance de la situación de seguridad en el Catatumbo, desde la Policía de Norte de Santander aseguran enfáticamente que no existen vías bloqueadas entre los once municipios que componen esta subregión.
Agregan que se han desplegado planes especiales de control en la zona, con un aumento de uniformados.
Como resultados reportan la captura de 16 personas en la última semana, por delitos como fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o municiones, tráfico, fabricación o porte de estupefacientes, homicidio, favorecimiento al contrabando de hidrocarburos y concierto para delinquir.
Dentro del plan de prevención, la Policía sostiene que hizo solicitud de antecedentes a más de 3 mil personas, 2.422 vehículos y motocicletas.
Los lugares priorizados por la Fuerza Pública para esta labor han sido los municpios Tibú y el Tarra, y los corregimientos de La Gabarra, Tres Bocas y Campo Dos.
Sin hacer referencia directa a los enfrentamientos entre el Epl y el Eln, la Policía optó por la invitar “a no difundir ni compartir información a través de redes sociales que generan zozobra en la región”.
Negaron acción
En la tarde de ayer, el Eln emitió un comunicado en el que niega su relación con un panfleto que se difundió en Norte de Santander, presuntamente a nombre del Frente de Guerra Nororiental de esa guerrilla, en el cual amenazan a los hombres del Epl, también llamados “Pelusos”, que actúan en esta zona.
No obstante, mientras esta guerrilla se centra en el reinicio de los diálogos de paz con el Gobierno, en el Catatumbo continúa la zozobra que genera este enfrentamiento, motivado al parecer en disputas por el territorio, la llegada de nuevos capos y los corredores del tráfico de drogas