No se pare de la mesa para viajar por el mundo
Visitando restaurantes en Medellín podría sentirse en 15 países. Sus chefs son de allá. Este es el mapa.
Medellín podría ser Ítaca y usted uno de los pretendientes de Penélope, pero no cortejándola mientras llega Ulises, sino dándose un banquete como los que los aqueos de un tiempo indeterminado y quizás ficticio acostumbraban darse.
A diferencia de ellos, que no consumían más que carne asada y pan, podría tener una comilona de ramen, falafel, asado, tartare de atún, samosas, eisbein y otras delicias del mundo. Porque la oferta gastronómica crece cada vez con propuestas culinarias de algún país en particular.
Podría hacer un tour que lo llevaría por un poco más de 20 restaurantes de la ciudad para degustar sazón alemana, vietnamita, peruana, argentina, hindú, mexicana, española, libanesa, turca, coreana, japonesa, italiana y francesa.
Lo mejor del recorrido será encontrarse con que en esos lugares los platos, o los mismos sitios, han surgido gracias a extranjeros que quisieron traer su cultura, expandirla más allá de sus fronteras y poner a comer a los paisas y visitantes, preparaciones hechas hasta con ingredientes traídos de India.
De uno en uno
Erdinc Timur es alemán, pero su familia es turca. Antes de establecerse en Colombia, hace un poco más de tres años, se movió entre Alemania y Turquía, cocinando. Aunque su profesión es pintor, de paredes, como dice él.
Cuenta que su sueño fue vivir en Latinoamérica porque quería aprender español, por el clima, la gente y la naturaleza. Si bien le gustó Brasil y Bolivia terminó en Colombia, entre otros motivos, porque un amigo ruso que vive en Cali le dijo que este era el mejor país de la región.
Entonces decidió vivir acá y preparar lo que tantos años había cocinado en Alemania: comida turca, específicamente kebabs, pero con “un poquito menos de condimentos”, porque a los colombianos no les gustan.
Desde Francia vino Thibault Turpin, enamorado de una colombiana, de la comida francesa y de los vinos de su país. Se juntó con amigos y fundaron Voilà Vinos.
Turpin es ingeniero mecánico y se especializó, según él, en proyectos internacionales. “Vimos que no había una cultura tan fuerte en Medellín del vino y el maridaje como en Francia; por eso, empezamos importando este licor y luego llegamos a la gastronomía”.
Sangmin Lee también creyó en Medellín y fundó Oppa Asado Coreano en octubre de 2017. Es dueño y cocinero, y el asado es su especialidad.
Antes de tomar esa decisión fue mochilero, y cuando llegó vio un gran potencial para la gastronomía de su país porque, según cuenta, “cuando la gente piensa en comida asiática, se imagina sushi y arroz chino”. Él quería mostrar que no es solo eso.
Y si sobre los manjares del oriente hay ideas limitadas, sobre los de la India sí que hay desconocimiento.
Ahora ha cambiado, señala Shakti, que nació en Nepal y es dueño y cocinero de Masala Restaurant. A él le ha tocado ir hasta la misma India a traer el arroz basmati y algunos condimentos para que los platos que ofrece tengan un auténtico sabor hindú. Así, sin ir hasta el segundo país más poblado del mundo se puede conocer un poco de él