BUSCAR FUENTES DE FINANCIACIÓN
A partir de los recursos recaudados por el 4 % adicional del impuesto al consumo de telefonía móvil el Museo pudo recoger el dinero de la primera etapa del mantenimiento. Este año se abrió de nuevo la Convocatoria Proyectos en Patrimonio Cultural Impuesto Nacional al Consumo 2018 para fortalecer los museos, archivos, bibliotecas
diciones ambientales adversas que lo rodean”.
Según Isaza, el edificio ha tenido una serie de intervenciones “bastante desafortunadas”, como la que hace Empresas Públicas para instalar un sistema de iluminación.
“Si bien este puede servir, no se tuvo en cuenta el carácter patrimonial del edificio y se hizo una instalación sobre la fachada con tubos, anclajes y demás, que causó efectos patrimoniales y/o centros de memoria a nivel local. Hasta ahora esta es la única línea a la que apunta el Museo de Antioquia para optar por el dinero necesario para terminar lo iniciado. Según cálculos de la Fundación Ferrocarril de Antioquia, el valor de esta intervención es de entre 900 y 1.000 millones de pesos.
tremendamente nocivos”, comenta el arquitecto.
Indica, además, que por la situación misma del edificio y el contexto social de la zona, muchas de las rejas están muy oxidadas como efecto de los orines, sobre todo la fachada Sur. “Ese orín, con un alto contenido en úrea, es altamente nocivo para los herrajes”.
Financiación y proyectos
Hasta ahora la única fuente de
financiación posible es la convocatoria pública de recursos de la telefonía móvil, manejada por el Instituto de Cultura y Patrimonio de Antioquia, a la cual está optando esta institución (ver recuadro).
La primera etapa costó 250 millones y se calcula que las tres caras restantes pueden llegar a alrededor de 1.000 millones de pesos. El edificio es propiedad de Alcaldía de Medellín. la Como lo indica la Ley General de Cultura, es responsabilidad del propietario mantener el bien de interés cultural en óptimas condiciones.
En este caso es el Museo de Antioquia como comodatario (quien ocupa y mantiene el edificio) el que ha tomado la delantera y ha tratado de conseguir los recursos para salvaguardar el lugar.
De puertas abiertas
Una de las preocupaciones más insistentes del Museo es el trabajo en su entorno: la recuperación del Centro, la seguridad, el diálogo con las comunidades y la apropiación de los espacios.
El proyecto Museo 360, por ejemplo, busca conciliar el espacio con el público circundante y la colección. Es una de las razones por las cuales abrieron las puertas como sucedió en el último año con las Residencias Cundinamarca (proyecto que reúne a artistas y comunidad) y el acceso a sus instalaciones por todos los costados.
“Nuestro trabajo será este año sobre Calibío, haciendo uso de la peatonalización de esta calle de una forma más contundente durante las 24 horas del día y que eso pueda unirse con el Jardín Infantil y la Casa del Encuentro”, comenta Maria del Rosario.
A la larga, para la directora del Museo es fundamental continuar con el proceso de diagnóstico y reparación del edificio. Esto en algún momento tendrá que llevar a un proceso de restauración