Ecuador llama a juicio a Naranjo por bombardeo
Cúpula militar y de policía son investigadas por bombardeo en frontera con Ecuador.
Poco más de 10 años después de ocurrido el bombardeo contra el campamento de Raúl Reyes, que tuvo como lugar la región de Sucumbíos (Ecuador); la Sala Única de la Corte Provincial de Justicia de esa región llamó a declarar en juicio al vicepresidente Oscar Naranjo, entonces director de la Policía Nacional y la alta cúpula militar de la época, Mario Montoya Uribe, Guillermo Barrera, Jorge Ballesteros, Freddy Padilla de León, y Camilo Ernesto Álvarez Ochoa.
Todo esto, dentro de la investigación por el delito de “asesinato” de los cuatro estudiantes mexicanos que se encontraban en el campamento de Reyes y que murieron con aquel 1 de marzo de 2008, por el efecto del bombardeo desplegado por el Gobierno colombiano en esa región fronteriza, en la llamada Operación Fénix.
Advierte el documento judicial que de no presentarse voluntariamente, “se proceda a su ubicación, localización y captura de los procesados para que se realice la audiencia de juzgamiento”.
Resalta además que el presidente Juan Manuel Santos, que para la época fungía como Ministro de Defensa, no se encuentra vinculado a la investigación por la inmunidad jurisdiccional que goza como Jefe de Estado. Aún así, aclara la Corte que esa es la razón por la que se abstiene de acusarlo, mas no por falta de elementos de juicio.
Así mismo, el Tribunal se manifiesta competente para volver a hacer las citaciones, dado que para la primera convocatoria, el 5 de septiembre del 2011, nadie compareció.
Según cursa en el expediente, en la Operación Fénix se lanzaron diez bombas racimo GBU-12-Paveway, de 500 libras, desde aviones de las fuerzas colombianas y con cooperación de Estados Unidos, devastando el campamento guerrillero ubicado en una zona selvática denominada Angostura, en las cercanías de la población Santa Rosa de Yanamaru, Sucumbíos,
Por el ataque murieron 25 personas, entre ellos el entonces segundo de las Farc, Édgar Devia, alias ‘Raúl Reyes’, el ecuatoriano Franklin Aisalla, y cuatro mexicanos: Soren Ulises Avilés Ángeles, Fernando Franco Delgado, Juan González del Castillo y Verónica Natalia Velásquez Ramírez.
La Justicia de Ecuador pudo establecer que estos eran estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México, UNAM, quienes se encontraban en lugar de los hechos “por asuntos académicos, debido a que su tema de investigación eran los grupos sociales, insurgentes”.
Crisis
En ese momento, el ataque generó una crisis diplomática
entre Ecuador y Colombia, pues desde el gobierno de Rafael Correa consideraron que el ataque fue una violación a su soberanía porque este no fue informado sino hasta cuando ya estuvo en marcha.
De hecho, al día siguiente, el presidente Correa anunció públicamente la expulsión del embajador colombiano en Quito.
La tensión fue aumentada a niveles mayores por cuenta del entonces presidente venezolano, Hugo Chávez, quien retiró el personal diplomático de su país y ordenó movilizar tropas a la frontera, entre ellos, los recordados aviones Sukhoi.
La polémica se habría de zanjar, al menos públicamente, en la XX Reunión Cumbre del Grupo de Río el 7 de marzo de ese mismo año, con un apretón de manos entre el entonces presidente Álvaro Uribe Vélez con sus homólogos Rafael Correa y Hugo Chávez