¿Estaría dispuesto a pagar por un chicle masticado?
Las plataformas de comercio electrónico han logrado que hasta lo más absurdo sea fácil de vender.
El famoso suéter utilizado por Kurt Cobain durante el MTV Unplugged de Nirvana en 1993 fue vendido en una subasta en 137.500 dólares. 4 meses después de esta grabación, Cobain perdió la vida a los 27 años, en el garaje de su casa en Seattle, el 5 de abril de 1994.
El mechón del cabello de Elvis Presley, la zapatilla de John Lennon con una gota de sangre o el aliento de Angelina Jolie y Brad Pitt en un envase de vidrio cerrado. Las casas de subastas saben del potencial negocio y hacen cualquier cosa por encontrar objetos para la venta. Internet y las tiendas en línea potencian este fenómeno.
La semana pasada se anunció que iban a ser vendidas las puertas del Chelsea Hotel, por donde pasó la bohemia neoyorkina: Mark Twain, Jack Kerouac, Humphrey Bogart, Bob Marley, Joni Mitchell, Patti Smith, Madonna o Andy Warhol.
Hay seguidores que pueden llevar sus obsesiones a un nivel totalmente nuevo. Están dispuestos a pagar lo que sea y después de todo las subastas son una forma de conseguirlo La actriz lo usó en el cumpleaños 45 del presidente de Estados Unidos John F. Kennedy en 1962. Fue vendido en 2016 por 4,8 millones de dólares. Se dice que el vestido le quedaba tan ajustado que las últimas puntas fueron dadas mientras lo tenía puesto. Además los 2.500 cristales fueron confeccionados uno a uno a mano. La actriz murió menos de tres meses después por una sobredosis de pastillas para dormir, a los 36 años.