Cien pulpos a una profundidad inusual
Los científicos no se cansan de repetirlo: sabemos más sobre la superficie de la Luna que sobre el fondo marino. Por eso no se sorprenden cuando descubren nuevas especies en los paisajes marinos más extraños donde reina muchas veces la oscuridad total.
Recientemente una expedición en altamar ha descubierto un grupo enorme de pulpos de una nueva especie en un lugar donde no se los esperaba, a 3.000 metros de profundidad en el Océano Pacífico cerca de Costa Rica. Algo inusual ya que se trata de animales solitarios.
Usando drones descubrieron un grupo gigante de unos 100 pulpos hembra junto a sus huevos en un lugar más bien inhóspito para ellas. “Cuando vi las fotos por primera vez, pensé “¡No, no deberían estar allí! No a tanta profundidad y tantos ejemplares”, dice Janet Voight, científica en el Field Museum y autora de un nuevo estudio publicado en Deep Sea Research Part I por Voight, Anne Hartwell y Geoffrey Wheat.
Los pulpos pertenecen a una nueva especie hasta aho- kilómetros de Costa Rica en el Océano Pacífico es la distancia a la que están los pulpos.
ra desconocida del género Muusoctopus. Son animales de color rosado del tamaño de un plato y de enormes ojos. Los investigadores hallaron un centenar de hembras en una misma área.
Todos los ejemplares estaban ocupando las rocas de una pequeña área en un ambiente cerca de fuentes hidrotermales que los propios científicos consideraron un suicidio al estar expuestos a temperaturas más elevadas de lo habitual.
La hipótesis planteada en el estudio es que la población de esta especie recién descubierta ha debido aumentar tanto que algunos individuos se han tenido que desplazar a zonas más peligrosas y expuestas a aguas más cálidas.
La exposición a temperaturas más altas activa su metabolismo, por lo que necesitan más oxígeno del que puede proporcionar el agua caliente