LA SEGURIDAD Y LA TRANSICIÓN
Desde el último cambio de presidente, en 2010, la tasa de homicidios por 100.000 habitantes ha bajado de 34 a 24 en 2017, según el informe del Departamento Nacional de Planeación, PND. En ese mismo sentido, el total de los asesinatos cometidos en Colombia bajó este mismo periodo de tiempo, pasó de 15.459 a 11.985. Tras la firma del Acuerdo de Paz, el número de desplazados también tuvo un notorio descenso, según las cuentas del Gobierno, que registró 232.257 personas en 2010 a 91.800 en 2017. El pie de fuerza de la Policía Nacional aumentó en los últimos ocho años, al pasar de 159.459 hombres a 182.559. Asimismo, en el marco de la Ley de Víctimas, que entró en vigencia en 2011, se llegó a 791.801 indemnizaciones administrativas y 216.783 hectáreas de tierra restituidas a víctimas del conflicto. Según Camilo González, fundador del Instituto de Estudios sobre Paz y Desarrollo, Indepaz, “es una situación nueva la que recibirá el próximo presidente, como resultado del Acuerdo de Paz y la transformación de las Farc en partido político”. Para el experto, no cabe duda que “hay una guerra
terminada, aunque haya problemas de reincidencias locales y parciales”. Recalcó que el país transita por un periodo de transición hacia la superación definitiva del conflicto. “Sin embargo, aún no estamos en el posconflicto. Estamos en los riesgos de la transición y hay muchas familias esperando los programas del Gobierno en 400 municipios impactados por el conflicto. El nuevo presidente va a tener que lidiar con esa presión”, que se suma a la de EE.UU. por el aumento de cultivos de coca y a la interna por las posiciones políticas frente al acuerdo.