ÉPOCA DE CORRUPCIÓN Y REFORMAS
Con el fantasma de la corrupción creciendo, el deber del presidente será abordar de forma clara las reformas que necesita el país en justicia, pensiones y salud. Según el Monitor de Corrupción de Transparencia por Colombia, los sectores de salud y educación son los renglones que más han sido afectados estos hechos agrupando más del 32% de los casos recolectados. Asimismo, en el escalafón internacional de transparencia, en Colombia aumentó la percepción negativa, con una calificación de 37 sobre 100 puntos. Se ubica en el sexto puesto latinoamericano, que comparte con Brasil y Panamá, y 96 en el escalafón global. Andrés Hernández, director ejecutivo de Transparencia por Colombia, recalcó que el próximo presidente “recibe un país que está en deuda de tres reformas estructurales claves: la transformación del ejercicio del poder, la recuperación de la legitimidad del Estado y sanciones a los corruptos, y el quiebre con el clientelismo”. En este sentido, Hernández aseguró que el talante del próximo presidente frente a este tema será medido en los primeros 60 días: “En este tiempo, hay tareas inmediatas como es la designación de
funcionarios en entidades que manejan grandes presupuestos y han sido cuestionadas e investigadas, como el Sena o Fonade, por citar ejemplos. Sin duda eso es un mal indicador a futuro”. Aseguró además que si bien en el actual gobierno se ha avanzado en las políticas integrales (generales) anticorrupción, el próximo deberá hacer énfasis en la corrupción a menor escala, que ocurre a nivel local en programas como el PAE, y muestra las debilidades en el control a la microgerencia”